Agreguen al boxeo en la lista de deportes que alistan su regreso.
El promotor Bob Arum anunció el jueves que planifica una cartelera de cinco peleas el 9 de junio en el MGM Grand de Las Vegas, la primera de una serie de enfrentamientos que se realizarán en los próximos dos meses en el hotel de la ciudad.
Un segundo evento será escenificado dos días después. Todos serán transmitidos por ESPN como parte de una serie de carteleras, dos veces a la semana, entre junio y julio en el hotel.
No se permitirá el acceso de aficionados, y Arum indicó que los boxeadores y todo el personal involucrado en la organización será sometido a pruebas de coronavirus dos veces durante la semana. Aún se requiere la aprobación de la Comisión Atlética de Nevada, que se reunirá la próxima semana para considerar los eventos, junto con dos peleas de la UFC, en sus instalaciones de Las Vegas.
“Una vez que aseguremos esas peleas y la UFC consiga sus peleas iniciales, ambos pediremos fechas adicionales”, dijo Arum a The Associated Press. “La clave era asegurar suficientes pruebas y tenemos suficientes en Nevada para realizar los eventos”.
Además de las peleas de Arum, el promotor británico Eddie Hearn dijo la semana pasada que quiere montar combates en julio. ¿El sitio? El jardín de la mansión de su familia a las afueras de Londres. Hearn dijo a The Athletic que la primera cartelera está programada tentativamente para el 15 de julio.
Oscar De la Hoya y su promotora Golden Boy trabajan también para volver el 4 de julio, aunque no dio detalles. La UFC regresó a la acción a inicios del mes con una serie de peleas en Florida, incluyendo un evento de pago por evento que se realizó sin aficionados.
Arum aseguró que los boxeadores y entrenadores se someterán a pruebas al llegar a Las Vegas en la semana de la pelea, y serán hospedados en un piso “burbuja” en el MGM Grand. Tendrán permitido comer en los restaurantes aprobados del hotel y entrenar en el gimnasio de Top Rank.
Arum le dio el crédito a Jim Murren, exdirector ejecutivo del MGM, quien lidera un grupo de trabajo que lidia con el virus, de asegurar suficientes pruebas para los boxeadores, jueces, comisionados y todos los involucrados. Dijo que entre 60 y 70 personas serán examinadas sólo el día de la pelea.
Aunque las peleas antes de la pandemia se realizaban en el MGM Grand Garden, con capacidad para 16.000 personas, Arum dijo que los pleitos ahora se llevarán a cabo en el área del centro de convenciones o en un salón del hotel. No se permitirá el ingreso de la prensa al principio, debido a la logística de las pruebas.
La promotora Top Rank de Arum tiene un contrato de largo plazo con ESPN para realizar peleas que, antes de la pandemia, se transmitían en el canal principal y en el servicio de video por internet ESPN+. En febrero, la cadena se alió además con Fox para transmitir en la modalidad de pago por ver el combate entre Tyson Fury y Deontay Wilder, por el cetro de los pesados.
Aquélla fue la última cartelera realizada por Top Rank.
Arum dijo que charló el jueves con Fury, y hay planes para realizar una revancha, tal vez en algún lugar fuera de Estados Unidos, a finales de este año. Comentó que se prevé también para esas fechas un pleito de unificación del título de los ligeros, que causaría gran expectación, entre el hondureño Teófimo López y el ucraniano Vasiliy Lomachenko.
AP