En un día Nicaragua pierde cinco profesionales de la salud con síntomas de Covid-19

En un solo día, este miércoles, en Nicaragua fallecieron cinco profesionales de la salud con síntomatología de Covid-19, según la Unidad Médica Nicaragüense (UMN). LA PRENSA habló con los familiares de dos de estos sanitarios que confirmaron que la salud de los especialistas se complicó, tras contagiarse del SARS-CoV-2, que produce la Covid-19.

“Es terrible, desolador para el gremio” dijo uno de los voceros de la UMN, quien aseguró que esta situación implica otro llamado a las autoridades en función de salvar vidas. Advierte que es preocupante que los médicos sigan expuestos, atendiendo sin equipos de protección personal; una demanda que la han sostenido desde antes que los casos de Covid-19 aumentaran de forma drástica, como en la actualidad, expresó.

Entre los cinco casos se encuentran dos cirujanos, un anestesiólogo, una enfermera y un optometrista, dijo UMN. «Es un SOS», aseguró la fuente de UMN porque son cinco profesionales de la salud que no los reponés tan fácilmente, por los años de formación que implica un médico y luego, especializarte. El país ya tenía un déficit de sanitarios, y con la pandemia, la situación se pone más difícil», consideran.

Batalla contra el virus

Su vida se paralizó este miércoles cerca de las 5:00 de la tarde. El próximo viernes 12 de junio cumpliría 68 años. Desde el 2016, el anestesiólogo Juan Salvador Ortega Maliaños estaba retirado. Sus días los dedicaba a su otra pasión: la finca y la ganadería. En el gremio médico lo conocían como Salvador Ortega. Él se convirtió en otra víctima de Covid-19, según confirmó su hijo Norbert Ortega Moreno, también médico.

El 20 de mayo, el médico mostró síntomas de tos y fiebre, su esposa, también sanitaria, presentaba gripe. Él, valiéndose de sus conocimientos de años de auscultar el cuerpo humano y saber como funciona esa máquina milenaria, se atendió solo. Sabía que medicamentos eran adecuados, contaba con oxígeno, por prevención. Sin embargo, el virus avanzaba provocándole más dificultad para respirar, cansancio y la fiebre persistente.

Ante la insistencia de su hijo, quien está en España, decidió ir junto a su esposa al hospital Antonio Lenín Fonseca el martes 26 de mayo. A él lo internaron por su estado de gravedad y a ella le dijeron que podía seguirse tratando en casa. Sin embargo, al ver que no mejoraba, los médicos recomendaron su traslado al Alemán Nicaragüense , que se ha convertido en el referente en materia de atención a pacientes con Covid-19.

Llegó directo a la Unidad de Cuidados Intensivos el jueves 28 de mayo, donde recibió la atención necesaria, los medicamentos precisos y el cariño de estar entre colegas. Requirió de intubación el lunes 1 de junio. Su esposa también fue internada, ya que desde la revisión que le hicieron en el Lenín no había mejorado. Mucha gente estaba pendiente de él, dice su hijo, quien tenía confianza en los médicos, que a medida de sus posibilidades, han dado todo para atender a los pacientes. “Lo trataron bien, no hubo ningún problema”, sostiene.

El diagnóstico de Covid-19 se lo confirmaron a su papá en el Lenín Fonseca, y a su mamá en el hospital Alemán. Su papá no pudo seguir luchando y falleció; su mamá ha mejorado y este viernes esperaban que le den el alta médica. Ortega Moreno cree que su papá llegó un poco tarde a la unidad de salud, tal vez, porque se confió en los conocimientos de medicina. Muchas veces al ser del gremio, la persona cree que puede cuidarse solo,y realmente no fue así, considera.

“Dios sabe porque hace las cosas, y si no logró salir mi papá de la batalla, a pesar de que los médicos se comportaron como ángeles y todo, pero Dios sabe. A mi papá lo conocía mucha gente, hubieron muchas oraciones por él, pero con esto del virus, por muy fuerte que seás, muchas veces las batallas no se logran ganar, desgraciadamente”, expresó.

Como médicos conviven con la muerte mucho más de cerca que otros profesionales. Sin embargo, no estar cuando tu ser querido se va es doloroso. Es un cóctel de sufrimiento e impotencia, principalmente, por no poder viajar, debido al bloqueo de fronteras, producto de la pandemia, explicó Ortega Moreno.

Él contó con el respaldo de sus otros hermanos y familiares que se hicieron cargo del proceso de cremación y ahora las cenizas de su padre esperan el momento idóneo para que todos juntos den el último adiós. El otro caso confirmado por este periódico es el del optometrista José Alejandro Pereira, quien también se estaba atendiendo en casa y falleció este miércoles en el hospital Monte España.

Cifras inciertas

En Nicaragua los contagios de Covid-19 siguen aumentado, de forma exponencial, han advertido epidemiólogos. Mientras el Ministerio de Salud (Minsa) asegura que hay 1,118 casos y reconoce solo 46 muertes por Covid-19, médicos independientes afirman que hay un subregistro muy grande.

Parte de estas cifras que no se han transparentado incluyen a los sanitarios, que están en la primera línea de contagios, y son los más expuestos al virus. Hasta ahora, el régimen orteguista no ha reconocido, de forma oficial, un solo caso de Covid-19 en el sector sanitario, y mucho menos, sus muertes.

La Prensa (Nicaragua)