Perú pasó a ser este miércoles el país con la mayor mortalidad del mundo por la COVID-19, después de que Bélgica corrigiera su cifra de fallecidos por el coronavirus y restara 121 decesos a su balance del impacto de la enfermedad.
La rectificación de las autoridades belgas hizo que Perú ostente ahora ese récord mundial, una marca que era cuestión de días que alcanzara, pues el brote está lejos de ser controlado y las muertes se suceden por centenares en el sexto país del mundo con más casos confirmados al acumular más de 607.000 contagios.
Los 28.000 fallecidos por el virus SARS-CoV-2 que registra Perú se traducen en una mortalidad de 85,8 muertes por cada 100.000 habitantes, resultado de dividir el número de decesos por su población nacional de 32,6 millones de habitantes, según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI).
Por su parte, la nueva tasa de mortalidad del coronavirus en Bélgica se situó en 85,5 muertos por cada 100.000 habitantes al reportar ahora 9.878 occisos entre una población de algo más de 11,5 millones de habitantes.
El Gobierno belga hizo esta corrección a la baja de su recuento de fallecidos por coronavirus después de que en un inicio considerara dentro de las cifras oficiales de la pandemia los casos sospechosos.
La rectificación fue anunciada este miércoles después de revisar detalladamente una serie de decesos en residencias de ancianos que habían sido contabilizadas dos veces o cuyas causas de muerte no cuadraban con la sintomatología producida por el coronavirus.
EFE