Reinaldo Quijada: “CNE debe frenar el ventajismo del PSUV y generar confianza en las elecciones del 6D” 

UPP89 solicitó esta semana al CNE que en el marco del diseño de la Normativa Especial que regirá el periodo de campaña electoral para los comicios del 6 de diciembre, se ponga fin al ventajismo electoral del partido de gobierno y que se aclaren temas que son fundamentales para generar confianza en el proceso. A través de una comunicación fechada el 8 de octubre Reinaldo Quijada, Coordinador Nacional de UPP89 solicitó al ente comicial que se aclaren diversos temas que son de interés para el electorado, sin embargo hasta los momentos los directivos del CNE no han dado respuestas.

Frente a tal situación este lunes insistió en su solicitud a los rectores del CNE para que se aclaren estos temas fundamentales para el proceso comicial del 6 de diciembre tales como la paridad de género y alternabilidad, tomando en cuenta que la normativa electoral establece las condiciones sobre esta materia y que es una conquista social de las mujeres y por lo tanto debe tener un carácter irreversible.

Otro de los planteamientos de UPP89, explica Reinaldo Quijada, tiene que ver con las reuniones del PSUV en cadena nacional de radio y TV, con la presencia del presidente Maduro, así como las frecuentes concentraciones públicas del PSUV ante la mirada indiferente de las autoridades del CNE. “Es necesario un pronunciamiento público del CNE al respeto. Nos parece evidente, a menos que quisiéramos pasar por ingenuos, que se trata de una provocación premeditada del gobierno para desestimular el voto, restregándole al país que el gobierno/PSUV, hacen lo que les da la gana, sin que nadie le ponga un freno”, expresó Quijada.

En lo que respecta al financiamiento de la campaña electoral y, particularmente, al financiamiento de la alimentación e hidratación de los testigos el día del acto de votación, UPP89 solicita al CNE despejar las dudas que existen al respecto. “Solicitamos expresamente que el CNE asuma en su presupuesto el costo de la alimentación y de la hidratación de los testigos, al igual que lo hace con los miembros de mesa, los efectivos del Plan República y el personal técnico del CNE”, dijo Quijada. Recordó que durante las elecciones presidenciales del 2018, se instalaron 43.000 mesas de votación, un elemental cálculo matemático, partiendo de la base de la designación de un testigo principal y un solo suplente, se requeriría, a razón de 10 dólares por testigo, lo que suma una inversión de 860.000 dólares, monto al cual debe agregársele, el costo del personal que se requiere para la logística de distribución de las comidas y refrigerios. “En números redondos, ese monto ascendería a un (1) millón de dólares, cifra que sería inmanejable para cualquier organización con fines políticos, salvo para el partido de gobierno”.

“El testigo es un elemento fundamental e integral del sistema automatizado de votación, indispensable para garantizar la confiabilidad, transparencia y solidez del proceso electoral, por consideramos que para reducir los costos de financiamiento se podrían instrumentar diversos esquemas de conformación de “bloques afines” entre las organizaciones con fines políticos de manera de reducir el número de testigos, en el recinto de votación”, expresó.

La organización política también plantea  que se evalúe la actuación restrictiva del Plan República en zonas rurales o apartadas y apoyo logístico del CNE en esas zonas, que se emitan los salvoconductos y el suministro de gasolina  de manera oportuna; que no se limite el  alcance de la observación internacional y nacional; mayor equidad en el acceso a los medios públicos desde la pre – campaña y no sólo durante los 14 días que dura la campaña electoral; se confirme el uso de la tinta indeleble y que se establezca de manera real y efectiva un canal de comunicación permanente, entre CNE y partidos políticos.

Quijada fue consultado en torno a la posibilidad de que el proceso de votaciones se realice en dos días frente a ello destacó que “UPP89 expresa su total rechazo a la realización del acto de votación en dos días y a un eventual diferimiento del proceso electoral porque eso aumentaría el costo, ya de por sí cuantioso, de la participación”.