Julio Ramos, Frank Martínez, Luis Moreno, Maritza Silva, Efraín Lucena, Jorge Cordero y Ángela Colmenares murieron por falta de tratamiento en la última semana en el estado Lara.
Daniel Colmenares, coordinador de la Fundación Amigos del Paciente Renal, asegura que todos fallecieron por fuertes complicaciones.
Principalmente por no contar con un tratamiento interdiario de manera constante, fallas en las unidades de diálisis y la mala nutrición que están llevando debido a la situación económica.
Colmenares agregó que cada día se compromete el funcionamiento de algunas máquinas y las sesiones de atención pueden ser de 2 horas y 30 minutos, en lugar de las 4 horas regulares y de manera interdiaria. Lo que obliga a algunos pacientes a perder su turno y ser postergado a la siguiente sesión.
Carmen Padilla, paciente con insuficiencia renal, manifiesta que el millón 200 mil bolívares que recibe por pensión no le alcanza ni para comparar un protector gástrico, que cuenta 2 millones aproximadamente.
Esta situación la comparten la mayoría de los pacientes quienes manifiestan que tampoco tienen cómo llevar una dieta balanceada y mantener un buen estado de salud. Los pacientes renales con diabetes sufren más por esta situación.
Todo este panorama genera zozobra y preocupación en los pacientes renales quienes no saben quién será el próximo paciente en fallecer.
Fe y Alegría Noticias