A los falsos representantes, deberían sincerarse, así la gente no se ilusiona ni se confunde. Lo mejor que pueden hacer es decir que dialogan por plata. Que digan “jugamos” por plata y vamos a donde más nos conviene. Son muy pocos los que juegan por amor al País.
A medida que nuestro país se vuelve cada vez más débil e ignorante, quiero desearles a todos mis amigos, seguidores, enemigos, e incluso a los muy falsos, medios de comunicación, un feliz y saludable año nuevo, 2021 será un año inimaginable para Venezuela, según los antecedentes.
La política como negocio, les sirvió a todos para enriquecerse, robaron, nos engañaron, hundieron a Venezuela y solo les importó el dinero y sus propios intereses.
El régimen que suele acusar a la mayoría de los medios de fabricar ‘noticias falsas’, da información falsa sobre la situación de la pandemia como del País, para luego decir, que no son mentiras, sino hechos distorsionados.
Las noticias falsas y las acusaciones de promover falsedades, se han convertido en un arma utilizada por este Régimen como por sectores de la oposición. La guerra mediática alcanzó una escala sin precedentes, en Venezuela. Nunca en el pasado, ni relacionado con eventos internos, ha habido tanto ataque siniestro de estas noticias falsas. De hecho, esto es simplemente información errónea masiva para manipular la opinión pública, lo cual está conectado, con el rol creciente de los sistemas de información, especialmente internet.
Creo que no solo los políticos están cansados de las noticias falsas. Los periodistas ni siquiera intentan inventar noticias, están obligados a fabricar noticias donde no las hay, lo que es peor. Es por esto, que me parece, que una persona se asquea de sí misma». De hecho, no pueden ser derrotadas simplemente porque no existen. Y allí radica su impulso, diríamos, su grandeza. Las noticias falsas son resultado de un fenómeno, conocido como la “pos verdad”, cuando los hechos no influyen en la opinión pública, sino en las opiniones, prejuicios y mitos ya establecidos. Precisamente, la post verdad, ayuda al régimen a mantenerse en el Poder.
Para personas que estamos acostumbrados a trabajar con hechos. Tenemos que reconocer, que los hechos noticias, ya no están en demanda. La mitología se impone, está en demanda. Algo hermoso. Algo brillante. Algo en una hermosa envoltura, pero que no es realidad. Los ciudadanos se hallan en búsqueda de aquellas noticias que confirmen sus propios prejuicios y su forma de ver el mundo. Un relativismo aceptado por el que se construyen mundos artificiales de información, lo que resulta cada vez más fácil, con las redes sociales virtuales de las que ahora disponemos para informarnos.
El menosprecio por la evidencia, la academia y los medios de comunicación que supuestamente tenían mayor seriedad y ascendiente. Por otro lado, se ha reforzado, por parte de algunas élites, la incomprensión sobre las reales necesidades de la sociedad, conquistando de ese modo el seguimiento de cegatos ciudadanos. Así, podríamos explicar el fenómeno sorprendente de la transición y el posterior supuesto diálogo para resolver la crisis del País. A ello hay que sumarle la velocidad con la que operan las comunicaciones en nuestros tiempos, y una sociedad que no se atreve, a ir más allá de sus propios círculos para poder informarse, lo que hace aún más fácil la transmisión de informaciones deliberadamente falsas. Tenemos que reivindicar la nobleza de la verdad, que ha de ser distinguida y purificada de los simples hechos que pueden nacer a partir de ella.
Johnny Galue
@COOTUR