Estados Unidos tiene claro el objetivo: llegar a unas elecciones presidenciales libres en Venezuela. La manera para lograrlo, sin embargo, parece haber cambiado. “¿Qué queremos nosotros? Llegar a un momento de conversaciones, de negociaciones”, dijo en entrevista exclusiva con El Diario James Story, embajador de ese país para Venezuela. La condición, eso sí, es aprender de las “lecciones”: sostiene que no debe ser utilizado por el régimen de Nicolás Maduro para ganar tiempo y detener el cambio político. En este sentido, aseguró que la próxima Administración de Joe Biden “sabe que tiene oportunidades”.
El apoyo a Juan Guaidó como presidente interino sigue intacto, aunque reconoce que se deben hacer las cosas de manera diferente. También envía mensajes a los jerarcas del chavismo. Sobre Iris Varela, primera vicepresidenta del Parlamento chavista, Story dice que es “terrorista”. Y sobre Álex Saab, supuesto testaferro de Maduro, afirma que “queremos verlo extraditado a Estados Unidos”, aunque no detalla fechas.
Ataque al Congreso de EE UU
—¿Qué lectura hace, en su condición de embajador, de la toma al Congreso de Estados Unidos por parte de un grupo importante de personas, que sucedió el 6 de enero?
—Yo creo que para nosotros en Estados Unidos, y también en el mundo, fue un acto violento que no debió haber pasado. Por supuesto, la democracia norteamericana siempre decimos que no es un edificio, no es un papel, sino que es una idea. Hay que luchar todos los días para fortalecer la democracia norteamericana y también la democracia en otros países del mundo. Lo bueno es que las instituciones en mi país son muy fuertes, y estamos superando un momento difícil para todos nosotros.
—En un gesto bastante irónico, el régimen de Nicolás Maduro rechazó ese hecho. Jorge Arreaza, su canciller, dijo que Estados Unidos “padece lo mismo que han generado en otros países con sus políticas de agresión”. ¿Qué responde usted a eso?
—Ellos quieren hacer fiesta cuando hay problemas en otros países, pero nosotros somos muy autocríticos. Siempre pensamos que hay que mejorar la democracia norteamericana. Pero fíjese bien, las instituciones funcionan para todos; en cambio las instituciones en Venezuela funcionan solamente para 15 o 20 personas, un grupo chiquitico que está en Miraflores.
Imagínense ustedes por qué ellos no quieren que las instituciones no funcionen para todos los venezolanos: porque no quieren hacer una elección nacional dejando a todos participar en la forma que quieran. Imagínense a ellos saliendo del poder en Venezuela. Eso es algo que realmente me llama la atención. Las instituciones en mi país son muy fuertes, y estamos todos superando eventos malos. Mientras, en el caso de Venezuela, este grupo de Miraflores está haciendo todo para que los venezolanos no tengan oportunidades de expresarse a través del voto universal.
—Algunos sectores del chavismo dijeron que, de haber un momento idóneo para atacar a la oposición y meter preso a Juan Guaidó, era este en el que Estados Unidos se prepara para una transición del poder y tiene este conflicto político interno. De hecho, si bien no han atacado a dirigentes políticos, sí lo han hecho contra la prensa, luchadores sociales y ONG. ¿Cree usted que se aprovechan del momento político de Estados Unidos para aumentar la represión en Venezuela?
—Nunca se sabe exactamente qué van a hacer ellos y cuándo. Comenzaron por atacar a todas las instituciones, empezando con el TSJ exprés, luego socavaron las funciones de la Asamblea Nacional, atacaron a los partidos políticos, luego atacaron a la vida económica a través de la Ley Antibloqueo, y después las ONG, como acaba de mencionar usted, que estaban dando medicamentos y comida para el pueblo de Venezuela. Terminaron, o están por terminar su trabajo de muchos años, de la censura total en el país.
Los ataques de ellos son constantes y son los héroes venezolanos, tanto las enfermeras, los estudiantes, como la Asamblea Nacional y el propio presidente Guaidó, que están alzando su voz y poniéndole el pecho a un grupo de personas que siempre están tratando de reprimir y cometer crímenes de lesa humanidad en su contra. No sabemos qué van a hacer ellos, si van a aprovechar un momento u otro. Lo importante es destacar que ellos tienen años atacando a todas las instituciones y al pueblo de Venezuela.
—Pero ¿cómo responderá Estados Unidos si estos ataques se siguen incrementando?
—Tenemos respuestas. No voy a especular con ustedes, pero siempre tenemos nuestros planes también.
Es importante destacar que la comunidad internacional está apoyando al presidente Guaidó y a la Asamblea Nacional, porque ellos representan los intereses del pueblo venezolano. Pero fíjese, cuando nosotros lanzamos el Marco para la Transición Democrática en marzo del año pasado, estábamos enfocados en llegar a un momento para que los venezolanos tengan elecciones libres, justas y verificables. Nosotros no queremos decir quién puede o quién no puede ser el líder en Venezuela. Lo que queremos es que los venezolanos tengan la oportunidad de expresarse por sus votos y escoger a sus propios líderes. Esto es algo para mí que deberíamos pensar no solo la comunidad internacional, sino también los venezolanos. Hay que seguir la lucha para tener su libertad.
Legitimidad de la AN
—Estados Unidos apoya la continuidad de la Asamblea Nacional electa en 2015 y a Juan Guaidó como presidente interino. Sin embargo, expertos han explicado que la Comisión Delegada con la que se da esa continuidad no tiene las competencias constitucionales para ejercer como un Parlamento. ¿Se trata entonces de un apoyo con motivos más políticos que legales?
—No. Hay razones constitucionales, políticas y humanas para continuar con el apoyo a la Asamblea Nacional que representa los intereses de los venezolanos. La usurpación de funciones de la presidencia desde mayo de 2018 ha socavado la Constitución venezolana de muchas formas, y hay personas que quieren aplacar a un grupo democrático cuando no hacen este esfuerzo contra el propio régimen. Este régimen ni debería fortalecerse en otra elección fraudulenta que hicieron el 6 de diciembre de 2020. Para la comunidad internacional es importante destacar qué queremos nosotros: solamente elecciones libres, justas y verificables, algo que tenemos en mi país, en otros países, y que carece en Venezuela. Entonces vamos a seguir apoyando a las fuerzas democráticas en su búsqueda de la libertad en Venezuela.
Hay razones constitucionales, políticas y humanas para continuar con el apoyo a la Asamblea Nacional que representa los intereses de los venezolanos».
El Diario