Nicolás Maduro estaría utilizando cuentas faltas de Twitter para evitar que las autoridades de Cabo Verde extraditen a Alex Saab, informó Financial Times basándose en un análisis de inteligencia. El chavismo pretende influir en la opinión pública a favor del empresario colombiano, detenido en ese país desde junio de 2020.
El periódico británico aseguró que tuvo acceso a una copia del informe para el que se analizaron más de medio millón de publicaciones en la red social relacionada con Saab, señalado por Estados Unidos por la presunta comisión de al menos ocho delitos, incluido un amplio esquema de lavado de dinero.
El estudio concluyó que el Gobierno de Maduro y sus representantes están involucrados en una campaña coordinada para influir tanto en el gobierno de Cabo Verde como en la población para obstruir la extradición del colombiano.
El Gobierno chavista se ha esforzado por lograr la excarcelación de Saab bajo el alegato de que se trata de un diplomático que cumplía una misión especial desde Venezuela a Irán cuando las autoridades caboverdianas lograron su captura en la isla de Sal, a petición de una solicitud interpuesta por Estados Unidos en la Interpol.
“Nuestro análisis sugiere que ha habido un esfuerzo creciente, organizado por el régimen de Maduro, para dirigir la presión hacia el gobierno de Cabo Verde con respecto a las decisiones judiciales emitidas en el caso de extradición de Saab”, señaló el informe de inteligencia.
Se logró identificar dos grupos de cuentas de Twitter sospechosas: el primero creado en octubre pasado, desde el que se tuiteaba extensamente sobre el presunto testaferro de Maduro y luego dejaron de publicar el 3 de noviembre. Cinco de esas cuentas, indicó Financial Times, tuitearon sobre Saab más de 800 veces en pocas semanas.
El segundo grupo, continuó el diario británico, contenía 86 cuentas, todas creadas entre diciembre de 2020 y febrero de este año. Publicaban contenido similar sobre el caso de Saab. Muchos de esos perfiles no tenían imágenes ni en sus banners ni en sus avatares, algunos habían puesto la misma foto del empresario.
El Tiempo