Como insostenible calificó la diputada a la Asamblea Nacional por el estado Mérida electa en el año 2015 Mildred Carrero la actual situación que se vive en la región andina, donde los más perjudicados son los padres y madres de familia que utilizan este servicio de transporte para movilizarse diariamente.
La carencia de combustible y el desvío que del mismo hacen hacia el mercado negro ha afectado gravemente tanto al servicio de transporte público de pasajeros y mercancías, como al usuario particular.
«Sobre todo aquellos ciudadanos que residen en ciudades dormitorio como Tabay y Ejido y deben diariamente movilizarse hasta la ciudad de Mérida para poder cumplir con sus obligaciones laborales» señaló Carrero.
“Esta situación bizarra ha llegado incluso a los organismos del Estado puesto que hasta las ambulancias y patrullas están paralizadas por no tener gasolina.
Por supuesto que este abominable estado de cosas afecta a la población en general, que además de estar privada de movilidad por las semanas restringidas como consecuencia de las medidas tomadas por el régimen para contrarrestar la pandemia, tampoco pueden usar el servicio de transporte colectivo para realizar sus diligencias personales.
En Mérida se ha llegado a extremos ajenos al control de la pandemia puesto que los ciclistas han sido blanco del abuso y del autoritarismo de los cuerpos de seguridad del Estado” denunció.
La escasez de combustible afecta también el quehacer diario de los trabajadores del volante que dependen de este medio para llevar el pan diario a sus hogares, agregó.
Entre 1 y 2 horas diarias deben esperar los ciudadanos un autobús para movilizarse desde Tabay hasta el centro de la ciudad, denunció la parlamentaria.
Para finalizar señaló Mildred Carrero que es importante que se busquen soluciones verdaderas ante esta crisis que golpea sobre todo aquellos padres y madres vulnerables.
Nota de Prensa