En las protestas protagonizadas este domingo por centenares de cubanos en las localidades de San Antonio de los Baños (Artemisa, oeste) y Palma Soriano (Santiago de Cuba, este) se han registrado actos de violencia policial, según denuncias de testigos presenciales.
Esta mañana salieron a las protestas esos pueblos cientos de cubanos para expresar su rechazo contra el régimen al grito de «¡abajo la dictadura!», «libertad», «no tenemos miedo» y «patria y vida».
La inédita manifestación fue retransmitida en directo por usuarios de Facebook y tiene lugar en medio de una grave crisis económica y sanitaria en el país caribeño, donde la población se queja de falta de alimentos, medicamentos y otros productos básicos.
Residentes de San Antonio, un pueblo de la provincia Artemisa localizado unos 37 kilómetros al oeste de La Habana, contaron a reporteros de Efe que durante la manifestación callejera la Policía reprimió violentamente y detuvo a algunos de los participantes.
Ante las inusuales protestas pública en San Antonio, se presentó en el lugar el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, quien en un acto de respuesta celebrado en una plaza de esa localidad con un grupo de partidarios lanzó una proclama en la que culpó del desabastecimiento de víveres y medicinas al embargo de Estados Unidos contra la isla.
En las redes sociales del país caribeño han circulado en las últimas horas videos de otros lugares, como el pueblo oriental de Palma Soriano, donde cientos de personas también se han movilizado en las calles y se escuchan consignas como «no más mentiras», «unidad» y «queremos ayuda».
Esta es la protesta antigubernamental más grande que se registra en la isla desde el llamado «maleconazo», cuando en agosto de 1994, en pleno «periodo especial», cientos de personas salieron a las calles de La Habana y no se retiraron hasta que llegó el entonces líder cubano Fidel Castro.
El Nacional