El presidente de Perú, Pedro Castillo, aceptó la renuncia de su ministro del Interior, Avelino Guillén, y dio por concluida la designación del comandante general de la Policía Nacional (PNP), Javier Gallardo Mendoza, en medio de un conflicto entre los dos funcionarios salientes por la asignación de altos cargos policiales.
El mandatario peruano hizo el anuncio a través de Twitter, dos días después de que Guillén presentara su carta de renuncia.
El conflicto se debería a que el ministro del Interior se mostró inconforme con Castillo. Al parecer, el mandatario no se había decidido entre aceptar una lista con el nombre de 20 generales que, a juicio de Gallardo, debían pasar al retiro o, como sugirió Guillén, jubilar al titular de la PNP.
La disputa, además, se da en medio de señalamientos de irregularidades en contra del ya excomandante de la Policía por la supuesta discrecionalidad de los nombramientos y las jubilaciones, que impactarían en la eficacia del organismo.
Sin embargo, un sector de la Policía no estuvo de acuerdo con la participación del ministro en las decisiones de esa institución por considerar que no le competían a un civil.
Guillén asumió el cargo el pasado 4 de noviembre tras la dimisión del entonces titular del Interior, Luis Barranzuela, quien dejó el puesto en medio de un escándalo por organizar una fiesta durante las restricciones sanitarias por la pandemia. Por su parte, Gallardo fue puesto al frente de la Policía a a principios de septiembre. .
RT.