El presidente de Ecuador, Guillermo Lasso, firmó hoy lunes un decreto ejecutivo mediante el cual concedió el indulto a los presos con sentencia ejecutoriada por robo, hurto, estafa y abuso de confianza para reducir el hacinamiento en las cárceles del país, que atraviesan por una grave crisis.
«Firmo este decreto como una acción de respeto a los derechos humanos de muchas personas privadas de la libertad, que de acuerdo con la ley, ya tienen derechos de libertad y por razones de excesiva burocracia y de corrupción no lo han logrado», dijo el mandatario durante un acto oficial en Quito.
Agregó que el objetivo es reducir el hacinamiento en los penales, siempre cumpliendo los requisitos legales, ya que la sobrepoblación de presos «no solo genera violencia, sino también problemas de salubridad».
En la actualidad, las 36 cárceles ecuatorianas albergan a 34.821 presos, aunque la capacidad máxima instalada es de 30.169 plazas, de acuerdo con el gobierno.
El decreto concede el indulto a los presos que hayan cumplido el 40 por ciento de la pena impuesta bajo el anterior Código Penal y el 60 por ciento con el Código Integral Penal vigente, además, que no tengan otras sentencias ni medidas cautelares vigentes, procesos penales e investigación y sanciones disciplinarias.
Este es el tercer decreto de indultos que firma el presidente en nueve meses de gobierno.
Antes indultó a presos que padecen enfermedades terminales y a personas encarceladas por ciertas faltas asociadas a accidentes de tránsito.
Lasso afirmó que existen graves problemas en el sistema penitenciario como la violencia, el hacinamiento y la rehabilitación social, por lo que su gobierno busca dar soluciones integrales.
«Actualmente, con firmeza y decisión, estamos poniendo orden al descontrol y la violencia dentro de los centros de rehabilitación social», dijo, al referirse a la ola de violencia que se registró meses atrás en las cárceles por disputas entre bandas vinculadas al narcotráfico, mismas que dejaron muertos y heridos.
El mandatario subrayó que se busca construir un verdadero sistema penitenciario con políticas que se complementan con acciones como la repatriación de presos extranjeros y los indultos.
Para ello, el Poder Ejecutivo presentó este lunes la «Política Pública del Sistema de Rehabilitación Social con enfoque en Derechos Humanos», elaborada por el Servicio Nacional de Atención a Personas Privadas de la Libertad, con el apoyo de la Organización de las Naciones Unidas.
«Con esta política estamos dando un paso decisivo para lograr una verdadera rehabilitación social (…) La tarea es muy compleja, pero no es imposible», anotó al señalar que se prevé la reinserción de los presos a la sociedad, programas de desintoxicación, mejor infraestructura y tecnología carcelaria.
Por su parte, Jan Jarab, representante para América del Sur de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, felicitó la política ecuatoriana en favor de la población carcelaria.
Con información de Xinhua