Han Xu entendiblemente creció idolatrando a Yao Ming, hipnotizada por la sombra gigante que el miembro del Salón de la Fama de dos metros y 28 centímetros (7 pies y 6 pulgadas) proyectaba cada vez que pisaba una duela de la NBA.
Con dos metros y ocho centímetros de estatura (6-10), Han quisiera emular el impacto de Yao, incluida su influencia en el deporte en China. La pívot del Liberty de Nueva York quiere ser una referente femenina del baloncesto en su tierra natal.
Han está en camino de conseguirlo. Los fanáticos parecen no tener suficiente de la creciente estrella de 22 años.
“Han y Li (Yueru) han estado creando expectativas en línea y fuera de ella. Muchas niñas se han inspirado en Han y Li, y tenemos números que demuestran que más niñas han comenzado a participar en baloncesto en todos los niveles”, dijo el analista Michael Yuan, fundador del Equipo Fountainhead. “Claramente podemos ver mayor cobertura de noticias y otra clase de contenidos generados por usuarios de plataformas de redes sociales”.
Las jugadas más destacadas de Han generaron millones de vistas en plataformas de stream en China. Kuaishou, una plataforma de redes sociales global, recientemente fue anfitriona de una sesión en vivo con ella, que generó cerca de un 1,6 millones de vistas.
Han y Li, de dos metros de estatura (6-7), quien participa con el Sky de Chicago, son las más recientes de media docena de jugadoras chinas que han participado en la WNBA.
La primera en tener un impacto en la liga fue Haixia Zheng, quien promedió 8,9 puntos, en dos temporadas con Sparks de Los Ángeles Sparks en 1997 y 1998. Fue titular en 21 partidos en su primera temporada.
“Que jugadoras locales como Han Xu y Li Yueru tengan éxito en el máximo nivel, despierta interés entre la base de aficionados al baloncesto e inspira a la juventud en China a practicar el deporte”, dijo Jonathan Li, vicepresidente senior de la NBA en China.
Con información de AP