El incendio de Cures, en Boiro (A Coruña), iniciado en la tarde del jueves, ha quemado ya 600 hectáreas, según el último dato facilitado por la Xunta, y si ya fue necesario el desalojo de las 700 personas del camping Ría de Arosa, en el vecino municipio de Ribeira, ahora preocupa el hospital del Barbanza.
El alcalde de esta última localidad, Manuel Ruiz Rivas, ha dado orden de habilitar los polideportivos para cobijar a la gente que lo vaya necesitando.
Hay accesos cortados, un frente muy amplio que impone, y las labores de control están siendo muy complicadas por el viento.
El pueblo de A Pobra do Caramiñal, colindante de Boiro, también se ha visto perjudicado.
En este incendio se mantiene la situación dos, medida preventiva adoptada por la proximidad de las llamas a núcleos habitados.
Otro fuego, el de Mourentán, en Arbo (Pontevedra), ha quedado controlado esta noche tras quemar 400 hectáreas.
La evolución de los incendios empieza con los fuegos activos, pasan a estabilizados, siguen a controlados y concluyen cuando están extinguidos.
Medio Rural recuerda que está a disposición de la ciudadanía el número de teléfono gratuito 085, al que deben llamar en caso de detectar algún fuego forestal.
Además, existe un teléfono anónimo y gratuito, el 900 815 085, para denunciar cualquier actividad delictiva incendiaria de la que se tenga sospecha o conocimiento.
Fuente: EFE