El Gobierno de Nicolás Maduro firmó, la mañana de este viernes 23, un acuerdo marco de cooperación sobre desarrollo sostenible con el sistema de Naciones Unidas en Venezuela, representado por su coordinador residente Gianluca Rampolla.
Parte de los acuerdos reconocen los desafíos existentes, incluyendo las sanciones y los efectos de la pandemia de covid-19.
“Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) son nuestra guía común para superar los retos existentes. A pesar de serios desafíos globales, si aceleramos ahora, estos Objetivos todavía están a nuestro alcance”, dijo Rampolla desde la sede de la Cancillería.
Este plan, que abarca los años 2023 – 2026, prioriza la atención en al menos siete sectores (salud, educación, alimentación, ciencia y tecnología, pueblos indígenas y mujeres) por medio de tres áreas estratégicas:
1. El bienestar y la resiliencia de las personas: particularmente de la salud y la educación de la población en riesgo de quedarse más rezagada, apoyando los esfuerzos del país para luchar contra la pobreza y ofrecer más y mejores oportunidades de desarrollo que faciliten el goce de todos los derechos.
2. La transformación a una economía ambientalmente sostenible: apostando por el desarrollo productivo de Venezuela sensible al medio ambiente, que incida positivamente sobre la seguridad alimentaria y genere nuevas oportunidades de empleo digno, especialmente en los grupos más vulnerables, como mujeres, jóvenes y poblaciones indígenas.
3. La cohesión social inclusiva e igualitaria: promoviendo un clima de entendimiento mutuo y apoyo a medidas que propicien la inclusión social, el respeto a los derechos humanos, la igualdad de género y la prevención de los diferentes tipos de violencia.
“Este Marco establece el horizonte estratégico de cooperación de la ONU para potenciar el desarrollo sostenible de Venezuela, de los principios que representamos y de nuestra historia en brindar apoyo a las personas que más lo necesitan, cumpliendo el principio fundamental de la Agenda 2030 de no dejar a nadie atrás”, reiteró.
Mientras que la vicepresidenta Delcy Rodríguez aplaudió la firma de este plan y aludió durante su intervención a la “guerra económica”, así como a las sanciones como forma de ataque contra el país.
Con ello justificó “el desmontaje en el sistema económico, el desmontaje en el sistema de salud (…) Entendemos este plan como una forma de desarrollo para una Venezuela agredida”.
Rodríguez también dijo que se ha hecho uso político de la instrumentalización de los derechos humanos para atacar la administración de Nicolás Maduro.
Por su parte, el vicepresidente sectorial de planificación, Ricardo Menéndez, dijo que esta es una oportunidad para adecuar “ y ponernos en la situación que demanda un momento como este (…) Tenemos una oportunidad como país con el sistema de Naciones Unidas, una agenda focalizada en el desarrollo social que debemos mantener”.
Menéndez señaló como necesario apuntar a nuevas fases del desarrollo de la economía, la recuperación de los espacios de la ciudad, atención de la criusis climática y certificaciones de riesgo, así como la modernización del Estado y el fortalecimiento de sistema de indicadores nacionales.
En el 2021, la ONU alcanzó a 4,5 millones de personas en el país, apoyando, entre otros, su acceso a la salud, a servicios de agua y saneamiento y a una alimentación diversificada. Se apoyó también el regreso seguro a las escuelas y el fortalecimiento de los servicios de protección.
Fuente: Tal Cual