Los pilotos y tripulantes de aerolíneas comerciales suspendieron este sábado la huelga que realizan desde el pasado lunes en Brasil para exigir mejores salarios, mientras discuten una nueva propuesta patronal, y tan solo la retomarán el lunes, tras el fin de las fiestas navideñas.
El Sindicato Nacional de Aeronautas, que representa a pilotos, copilotos y auxiliares de vuelo, informó este sábado que la paralización fue suspendida provisionalmente hasta que una asamblea prevista para la tarde del domingo decida si los huelguistas aceptan o no la nueva propuesta de reajuste salarial realizada por las aerolíneas.
Como la huelga es de dos horas diarias entre las 6.00 y las 8.00 hora local (entre las 9.00 y las 11.00 GMT) de cada día, la posible retomada de la paralización solo se producirá el lunes, lo que garantizó la normalidad de los vuelos que miles de brasileños tienen previstos para la víspera y la Navidad.
La posibilidad de que la paralización se extendiera el 24 y el 25 de diciembre venía generando preocupación entre las aerolíneas, que planearon para estos dos días un número de vuelos en un 45 % superior al de las mismas fechas del año pasado debido a la alta demanda.
La huelga viene provocando decenas de atrasos y numerosas cancelaciones de vuelos en nueve de los mayores aeropuertos de Brasil, principalmente en los dos de Sao Paulo, la mayor ciudad del país y los de más tránsito aéreo.
Tan solo el viernes el aeropuerto de Congonhas, destinado a los vuelos regionales desde y hasta Sao Paulo, tuvo que cancelar 14 vuelos y atrasar otros 78. El mismo día el aeropuerto Santos Dumont de Río de Janeiro, igualmente de vuelos regionales, registró 50 atrasos y seis cancelaciones.
La paralización también ha provocado atrasos de vuelos y generado largas filas matinales de pasajeros en los aeropuertos de Brasilia, Belo Horizonte, Porto Alegre, Fortaleza y Campinas.
Los pilotos exigen que sus salarios sean corregidos por la inflación del último año, de cerca del 8 %, y que se les conceda un aumento real adicional del 5 %.
La propuesta de reajuste que discutirá el sindicato el domingo es la cuarta realizada por las aerolíneas desde el inicio de las negociaciones hace tres meses.
En su última oferta, rechazada por el sindicato el jueves, el Sindicato Nacional de Empresa Aéreas, que representa a las aerolíneas, ofreció corregir los salarios por la inflación y conceder un aumento real del 1,0 %.
Los pilotos alegan que sus salarios no fueron aumentados en 2020 y 2021 por la crisis generada por la pandemia de la covid-19, que dejó los aviones en tierra por varias semanas y provocó millonarias pérdidas a las aerolíneas, pero que actualmente las empresas están recuperándose y lucrando con los elevados precios a los pasajes.
Según los sindicatos, el salario mínimo para un piloto de avión comercial en Brasil es de 9.400 reales (unos 1.807,7 dólares) y el de un auxiliar de vuelo de 2.277 reales (unos 437,9 dólares).
Los huelguistas también reivindican que se les respeten sus días de descanso y un aumento de las horas en que pueden descansar entre un vuelo y otro.
Con información de Agencia EFE