Azucareros aseguran que 70 mil toneladas de azúcar represadas debido a las importaciones

Desde la sede de su bloque gremial, en Guanare, los cañicultores del sur del estado Portuguesa se pronunciaron en rechazo a las importaciones de azúcar promovidas por el gobierno de Nicolás Maduro.

“Las importaciones de azúcar afectan a los cañicultores nacionales y, en especial, a los de la región, que contamos con un inventario de 80 % de este rubro. Y aunque esta política desleal no es nueva, se viene observando marcadamente desde octubre de 2022”, declaró a El Pitazo Emilio Vargas, presidente de la Sociedad de Cañicultores del Central Tolimán (Socatol).

“Estamos en plena zafra y nos preocupa el alto inventario de azúcar importada: nuestra azúcar no sale al mercado, hay una competencia desleal con la azúcar importada, que paga bajos aranceles e, incluso, mucha de ella ingresa por los caminos verdes”, señaló Vargas.

“Estamos sin pago porque nuestra azúcar no puede ser colocada en los anaqueles”, enfatizó Vargas.

En este contexto, los productores de caña de azúcar solicitan al Gobierno que se cumpla el acuerdo firmado el 11 de diciembre del pasado 2022, el cual estableció la fijación de un arancel alto para evitar las importaciones.

Vargas exigió que en tiempo de zafra se prohíba la importación de azúcar para evitar que esta compita contra el azúcar nacional. “De ser necesario, las importaciones deberían ser retomadas a partir del mes de mayo, una vez concluida la molienda”, destacó el cañicultor.

La importación de azúcar afecta notablemente a 5 asociaciones de productores del sur del estado Portuguesa, las cuales agrupan a 900 cañicultores. “En todo el país las importaciones están quebrando económicamente a entre 1.800 o 2.000 cañicultores”, según la cuenta del bloque intergremial.

La procedencia de azúcar importada es principalmente de Brasil y Colombia, en donde la producción es mucho más alta que en Venezuela, con un rendimiento de hasta 12 toneladas por hectáreas. En nuestro país, el promedio oscila entre 5.5 y 6 toneladas por hectárea, refleja la estadística de Socatol.

“Mucha de esa azúcar no es refinada, son blancos directos y, en su mayoría, no tiene control sanitario, pudiendo afectar a la población”, advirtió el vocero Emilio Vargas.

Se estima que, a la fecha,se encuentran paralizadas en almacenes de los centrales entre 60.000 y 70.000 toneladas de azúcar,lo que representa 2 meses de inventario.

El dirigente cañicultor alegó que el rubro caña de azúcar es el único en Venezuela que ha crecido un 30 % interanual durante los 2 últimos años, logrando en la zona Guanare-Papelón una proyección de 900.000 toneladas, lo que se traduce en 76 millones de kilos de azúcar para el consumo nacional.

“Esta producción alcanzada es solo por esfuerzo propio de los cañicultores, porque no hemos recibido ningún tipo de financiamiento”, aclaró.