Los bancos regionales estadounidenses cayeron este martes en Wall Street al resurgir el temor por la salud del sistema financiero tras el colapso de First Republic Bank, intervenido ayer por las autoridades y vendido parcialmente a la mayor entidad del país, JPMorgan Chase.
Al cierre de la bolsa, encabezaron las pérdidas PacWest, que se hundió un 28 %, seguido por Metropolitan Bank, que cayó un 20 %, y Western Alliance, un 15 %. El fondo cotizado KRE, que representa al sector de bancos regionales, se dejó un 6,27 % en su peor jornada desde las turbulencias de marzo.
Las caídas se produjeron también en medio de nerviosismo ante la conclusión mañana de la reunión de política monetaria de la Reserva Federal, en la que previsiblemente el banco central decidirá subir los tipos de interés otra vez, en 25 puntos básicos.
«Wall Street está presionando el botón de vender ya que parece que los problemas bancarios no se irán pronto y está listo para centrarse en el siguiente eslabón más débil, potencialmente un prestamista con una gran exposición al sector inmobiliario comercial», opinó el analista Edward Moya, de Oanda.
En la madrugada de este lunes, y tras un fin de semana de especulaciones, los reguladores de EE.UU. intervinieron First Republic Bank y llegaron a un acuerdo para vender la mayor parte de sus operaciones a JPMorgan por 10.600 millones de dólares.
El de First Republic es el tercer colapso de un banco regional en apenas dos meses en EE.UU., después de los de Silicon Valley Bank y Signature Bank el pasado marzo.
La entidad se había hundido en bolsa y había perdido prácticamente todo su valor la semana pasada, cuando divulgó sus resultados trimestrales y reveló que sus clientes habían sacado más de 100.000 millones de dólares en depósitos durante la reciente crisis bancaria.
Con información de EFE