Clara Ramírez, defensora de los Derechos Humanos e integrante de Fundaredes, aseveró este viernes que la salud de Javier Tarazona, director de la oenegé, está muy deteriorada tras más de 900 días preso, y que requiere de 19 medicinas diarias.
Recordó que previo a la detención del activista, este tenía enfermedades cardiovasculares, y respiratoria, “pero hoy sufre 10 patologías”.
Indicó que el preso político de 41 años toma 19 medicamentos diarios y que actualmente sufre de hipertensión arterial, arritmia cardíaca, síndrome cardiometabólico, asma, taquicardia, insuficiencia venosa en grado dos, soriasis, fisuras rectales y neumonía atípica.
“Desde 2021 hemos alertado sobre las torturas y tratos crueles que ha sufrido Javier en prisión. En 2022 tuvimos derecho de palabra ante el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas para decir que Javier ha sido víctima de tortura, tratos crueles y degradantes, y el Estado venezolano no ha iniciado investigaciones al respecto”, criticó Ramírez.
El tema de salud del detenido también fue tocado este viernes por Alfredo Romero, presidente de la oenegé Foro Penal, quien denunció que «no le han dado las medicinas que le corresponden» a pesar de tener una «situación de salud delicada» por «problemas» relacionados con diabetes y fibrosis pulmonar.
«Es una persona que, así como muchos otros, requiere no solo su libertad por la situación de salud humanitaria, sino también porque está privado injustamente de su libertad», declaró.
Tarazona denuncia torturas
El abogado Alfredo Romero también informó este viernes que Javier Tarazona ha denunciado ante un tribunal haber sufrido torturas. «No estamos diciendo que hubo o no tortura, pero la víctima dice que fue torturada y se requiere, obviamente, una investigación», dijo en rueda de prensa, según EFE.
Aseguró que el tribunal, ante la «presión de esas denuncias», las ha «remitido» a la Defensoría del Pueblo y al Ministerio Público (MP), ente al que «requirió que se investigara».
«Estamos esperando que se investigue, no porque nosotros lo decimos, porque el tribunal lo requirió y porque la propia víctima señaló que había sido torturada», explicó.
Por su parte, José Rafael Tarazona, hermano del activista, dijo no encontrar «razón alguna para que el Estado venezolano lo siga manteniendo en prisión», y aseguró que ha recibido «mensajes por parte de funcionarios» del «alto Gobierno donde dicen que ellos no tienen problemas en liberar a Javier».
«Pero pareciera que hay alguien en específico que no lo permite, y estamos indagando quién es esa persona que mantiene o que quiere mantener a Javier detenido injustamente como un rehén, como un secuestrado», expresó su hermano.
Javier Tarazona fue la principal voz de denuncia de un conflicto entre la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb) y disidencias de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc) que se desarrolló en una zona fronteriza con Colombia en 2021.
El director de Fundaredes fue detenido el 2 de julio de ese año, cuando acudió a la sede de la Fiscalía en Coro, en Falcón, a denunciar que estaba siendo víctima de acoso y persecución por funcionarios de la Policía de esa región, agentes del Sebin y sujetos sin identificar, denunció entonces la oenegé.
Posteriormente, fue imputado por incitación al odio, terrorismo y traición a la patria.
Fuente: Tal Cual y EFE