El gobernador del estado Miranda, Héctor Rodríguez, aseguró como representante de la delegación del Gobierno la tarde de este sábado que «lo que pasó es cosa juzgada», en referencia a la decisión del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) de emitir sentencias sobre las inhabilitaciones para ejercer cargos públicos y que fueron ratificadas contra la coordinadora de Vente Venezuela, María Corina Machado, y el exgobernador Henrique Capriles.
Tras las declaraciones de la Plataforma Unitaria, en las que se señaló que hubo violación al debido proceso porque no se permitió la realización de un juicio y el derecho a la defensa, Rodríguez recordó que se dio cumplimiento «a carta cabal» del Acuerdo de Barbados al habilitarse el mecanismo para revisar las inhabilitaciones en el TSJ, al tiempo que destacó que aquellos que hayan cometido delitos contra el país como llamar a golpes de Estado, pedir sanciones económicas o participar en un magnicidio, no deberían participar en procesos democráticos.
Recalcó que ni en el Acuerdo de Barbados ni en las conversaciones que se sostuvieron con actores opositores se habló de la disposición para un solo candidato -como sería el caso de María Corina Machado-, pero dijo que sí se dejó en claro que las personas que incurrieron en irregularidades «deben asumir sus consecuencias».
El vocero del Gobierno subrayó que los documentos firmados tienen como encabezado «en el respeto de la Constitución y las leyes», por lo que insistió en varias ocasiones que las personas que vayan por el camino violento y participen en actos desestabilizadores no pueden pretender estar habilitados.
Dijo que no había impasse alguno con EEUU tras la ratificación de sentencia contra Capriles y Machado, ratificando que fue creado un método expedito para revisar los casos de inhabilitaciones y levantando la misma a quienes cumplen con las leyes y la Constitución. «Si somos serios, lo que ha pasado es lo racional«.
De igual forma, insistió en que la delegación del Gobierno se mantiene en la mesa de diálogo y destacó que las autoridades «no van a aceptar amenazas ni chantajes», ya que habrá elecciones «con todas las garantías electorales» y se harán todos los procesos correspondientes, al igual que se invitará a la observación internacional «que establezca el CNE».
Además, Rodríguez puntualizó que en Venezuela «hay estado de Derecho» y que el diálogo no debe ser usado por la oposición «como un camino para excusarse en responsabilidades, legitimar ni pedir el bloqueo o sanciones».
En ese sentido, exigió por parte del Ejecutivo el desmontaje inmediato de tales penalizaciones para así poder «acelerar» el proceso de estabilidad económica en Venezuela, que a su vez repercutirá en la disminución del flujo migratorio a EEUU.
Cree que ese país «fue llevado a una trampa» por parte de algunos sectores opositores, ya que estos «le mintieron» al decirles que «si tomaban esta o aquella acción, el chavismo se cae. 25 años en el poder deberían decirles que el chavismo es una realidad y que deben reconocerla, así como reconocemos a la oposición».
Héctor Rodríguez, en nombre del Gobierno, reconoció y saludó al jefe de la delegación opositora, Gerardo Blyde, por haber expresado de manera pública su rechazo a los hechos de violencia en el país y conminó a los demás líderes opositores a hacer lo mismo.
Aclaró que lo que falta es instalar la comisión de verificación e implementación del Acuerdo de Barbados y aseveró que ya el Ejecutivo ya está listo para ello.
Con información de Foco Informativo