Salvar el Lago de Maracaibo contribuiría a mejorar el ecosistema del Mar Caribe

Salvar el Lago de Maracaibo es la mejor contribución al mejoramiento del Gran Ecosistema Marino del Caribe. Fue el consenso al que se llegó tras el Taller de Conservación y Desarrollo sostenible de la Cuenca del Lago de Maracaibo.

El evento se llevó a cabo este jueves 11 y viernes 12 en el auditorio del Instituto para el Control y la Conservación de la Cuenca del Lago de Maracaibo (Iclam), auspiciado por el Ministerio del Poder Popular para el Ecosocialismo (Minec).

El encuentro estuvo marcado por el abordaje científico hacia los problemas que en materia de contaminación ambiental presenta el estuario zuliano.

De las conclusiones arrojadas por el encuentro, destaca la aplicación sostenida del Plan Maestro para el Rescate, Conservación y Desarrollo Sostenible del Lago de Maracaibo, pues se erige como uno de los principales aportes “para la contribución al mejoramiento del Gran Ecosistema Marino del Caribe, el cual forma parte del Programa Integrado Océanos Limpios y Saludables del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM)”.

Los métodos para las acciones a seguir se elaboraron en las mesas de trabajo, “constituidas por representantes de instituciones con competencia en el área, voceros de las comunidades y los Consejos de Pescadores y Pescadoras (Conppas), todos en búsqueda del establecimiento de las prioridades, las medidas necesarias de la ruta a seguir para el diseño y ejecución del proyecto, y las inversiones en infraestructuras para la conservación de ecosistemas y las cuencas asociadas al Lago”, informaron desde el Minec.

¿Qué hacer?

La propuesta de trabajo, pensada por los especialistas, contempla tres componentes: La generación de información científica para promover la concientización; la toma de decisiones y acciones informadas para el desarrollo sostenible de la Cuenca del Lago de Maracaibo y el fortalecimiento de las capacidades del sector público para el diseño, financiamiento e implementación de políticas públicas, con miras a disminuir el flujo de nutrientes por fuentes puntuales y dispersas desde las subcuencas al Lago de Maracaibo.

La complejidad ecológica del estuario con sus humedales y biodiversidad son muy sensibles a la contaminación proveniente de las actividades generadas por las ciudades con cota lacustre, a las actividades agrícolas, las industriales y turísticas en franco crecimiento, por lo que la constante supervisión de las mismas se ha de convertir en una norma.

 

 

 

Fuente: Últimas Noticias

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