El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró el 12 de julio con una bajada del 0,50 %, hasta 82,21 dólares el barril -rompiendo así su racha de cinco semanas consecutivas de ganancias- pese a la reciente caída de inventarios y los favorables datos de inflación.
Al término de la jornada en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en agosto restaron 41 centavos de dólar con respecto al cierre de la sesión anterior.
El incremento del Índice de Precios al Consumo (IPC) de EE.UU. se redujo en tres décimas hasta el 3 % en junio, el dato de inflación de los doce meses más bajo desde abril de 2021, según datos de la Oficina de Estadísticas Laborales.
Esto, unido a la caída de los inventarios en 3,4 millones de barriles la semana pasada, da esperanzas a los inversores de que se produzca un repunte de la demanda de energía y de que la Reserva Federal (Fed) lleve a cabo recortes en las tasas de interés en septiembre.
La Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP) prevé un crecimiento de la demanda de 2,2 millones de barriles diarios para este año. Sin embargo, la Administración de Información Energética (AIE) difiere con la alianza y pronostica que el crecimiento de la demanda mundial de petróleo se situará en una media ligeramente inferior al millón de barriles diarios en 2024.
En otros mercados, los contratos de gas natural para entrega en agosto subieron a 2,33 dólares por mil pies cúbicos, y los contratos de gasolina con vencimiento el mismo mes bajaron a 2,51 dólares el galón.
El barril de petróleo Brent para entrega en septiembre cerró en el mercado de futuros de Londres con una bajada del 0,43 %, hasta 85,03 dólares.
El crudo del mar del Norte, de referencia en Europa, cayó 0,37 dólares respecto a la última negociación en el Intercontinental Exchange (ICE), cuando terminó en 85,40 dólares.
De esta manera, el Brent cierra así una semana de alternancias en su precio, que acaba con una pérdida de más de 1,5 dólares respecto al nivel con que abrió la sesión el lunes.
Pese a ello, los analistas avisan de que la caída de la inflación en Estados Unidos mayor de la esperada reforzó las perspectivas de que la Reserva Federal comience a bajar los tipos de interés este año, lo que eleva los pronósticos de una mayor demanda de energía.
Con información de EFE