Este lunes, el presidente de República Dominicana, Luis Abinader, anunció la posibilidad de emitir permisos de trabajo para los migrantes venezolanos cuyo estatus documental se encuentra caducado.
Esta medida, previamente implementada en el pasado, busca atender a la situación irregular de muchos venezolanos en el país. La propuesta refleja una intención de reconocer la histórica colaboración entre ambas naciones y abordar de manera práctica las dificultades que enfrentan los migrantes en su situación actual.
Luis Abinader ha señalado que la República Dominicana ya ha facilitado permisos de trabajo en circunstancias similares en el pasado. La política de permitir el empleo a migrantes con documentos vencidos ha sido aplicada antes debido a problemas administrativos y dificultades enfrentadas por los migrantes para mantener sus papeles al día.
El mandatario dominicano argumenta que esta decisión está motivada por una “deuda histórica” que República Dominicana tiene con Venezuela. Abinader recordó el apoyo brindado por el expresidente venezolano Rómulo Betancourt durante la lucha contra la dictadura de Trujillo, así como la colaboración en favor de la democracia en los años siguientes.
De acuerdo con el Centro de Derechos Humanos de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), hay aproximadamente 124,141 migrantes y refugiados venezolanos en República Dominicana. De este total, cerca de 20,600 se encuentran en una situación irregular, lo que implica que no cuentan con un estatus legal actualizado para trabajar.
El análisis demográfico revela que el 43% de estos migrantes son hombres y el 57% son mujeres. Además, un 40% de los venezolanos tiene educación universitaria, pero solo un 23% de ellos está empleado formalmente. Esta disparidad resalta la necesidad urgente de medidas que faciliten el acceso al mercado laboral y mejoren las condiciones de vida de esta población.
La propuesta de permitir el trabajo a los venezolanos con documentos vencidos podría tener varios efectos positivos. En primer lugar, ofrecer permisos de trabajo podría mejorar significativamente la calidad de vida de los migrantes al proporcionarles estabilidad económica y oportunidades laborales.
Esto también podría contribuir a la integración más efectiva de los venezolanos en la sociedad dominicana, facilitando su participación activa en la economía del país. Además, esta medida podría aliviar parte de la presión sobre los sistemas de asistencia social y los servicios públicos al permitir que los migrantes contribuyan formalmente a la economía.
La posible implementación de permisos de trabajo para venezolanos con documentos vencidos representa un paso positivo hacia la resolución de problemas complejos de migración y empleo. Es crucial que esta medida se acompañe de un proceso claro y accesible para la regularización de estatus, garantizando que los migrantes puedan obtener los permisos necesarios sin enfrentar obstáculos adicionales.
También se recomienda que se desarrollen programas de integración que ayuden a los venezolanos a adaptarse y prosperar en su nuevo entorno, optimizando así el impacto positivo de la medida tanto para los migrantes como para la República Dominicana. La colaboración continua entre ambas naciones y la atención a las necesidades de la población migrante serán esenciales para lograr una solución duradera y justa.
Con información de El Clarín.