Venezuela se enfrenta a una grave crisis ambiental debido al aumento constante de los derrames petroleros. Alejandro Álvarez, coordinador general de Clima21, detalló que en el país se registra un promedio de siete derrames petroleros mensuales, una situación que pone en riesgo ecosistemas frágiles como el Lago de Maracaibo y afecta directamente a las comunidades locales.
Álvarez advirtió que la falta de reportes oficiales impide conocer la magnitud real del problema y dificulta la toma de medidas efectivas. El estado Zulia, con una larga historia de explotación petrolera, es una de las regiones más afectadas, especialmente la cuenca del Lago de Maracaibo.
“Sin información adecuada y precisa, no podemos entender lo que está ocurriendo; no podemos prepararnos para cualquier situación y, por lo tanto, vemos cómo los daños, en general, tienden a multiplicarse”, aseveró.
El registro de Clima21 se basa en la información que obtienen de los medios de comunicación y las denuncias efectuadas a través de redes sociales.
Aunque hubo mejoras en la gestión de estos derrames durante los años 90 gracias a los Planes Nacionales de Contingencia, la situación empeoró en los últimos años. Esto, explicó, por la falta de información y la grave afectación en los ecosistemas, en especial en la cuenca del Lago de Maracaibo.
Advirtió que los municipios de la Costa Oriental del Lago son los más afectados, incluso en áreas con escasa población como Bachaquero, donde hay gran concentración de instalaciones petroleras que debido a la falta de mantenimiento han provocado derrames de crudo constantes.
Álvarez lamentó el deterioro del Lago de Maracaibo, uno de los principales cuerpos de agua de América del Sur, afirmando que su recuperación será difícil y costosa.
“No solamente se afecta el ambiente, sino que se afecta a todas esas personas en esos municipios costeros y no costeros”, puntualizó.
Con información de Radio Fe y Alegría Noticias