Amamantó a su bebe de 3 meses borracha, se durmió sobre ella y la asfixió

En el estado Zulia, un terrible suceso conmociona a la comunidad: una bebé de apenas tres meses perdió la vida debido a la negligencia de su madre. Patricia Meza, una joven de 23 años, se encuentra tras las rejas por el infanticidio de su hija, Salomé Castillo. Los hechos ocurrieron en el sector Blanco, avenida 51 de la parroquia Venancio Pulgar, en Maracaibo.

El CICPC, específicamente la división de homicidios de Zulia, fue el órgano encargado de aprehender a Meza tras el trágico acontecimiento.

Las autoridades han detallado que, la noche del incidente, Patricia Meza, en estado de embriaguez, decidió amamantar a su hija. Sin embargo, el alcohol le provocó un sueño profundo del cual no despertó hasta horas después. Fue entonces cuando, al notar la ausencia de signos vitales en la pequeña Salomé, se dio cuenta del terrible error que había cometido.

La investigación reveló la causa de la muerte de la infante: asfixia mecánica por sofocación. Según informes del servicio nacional de medicina y ciencias forenses (Senamecf), la bebé falleció al quedar aplastada por el cuerpo de su madre mientras esta dormía.

Este hecho ha generado una oleada de comentarios y reflexiones sobre la importancia del cuidado infantil y los peligros asociados al consumo de alcohol en situaciones delicadas.

La comunidad está consternada y muchos exigen que se impongan sanciones ejemplares para evitar que tragedias similares se repitan. El infanticidio es un flagelo que lamentablemente no es nuevo en esta región del país, aunque este caso en particular ha remecido aún más a la población debido a las circunstancias que rodearon el fatídico desenlace.

La Fiscalía 35° del Ministerio Público de la Circunscripción Judicial Penal del estado Zulia es la encargada de llevar adelante el caso. Los procesos legales ya se han puesto en marcha, buscando esclarecer todos los detalles de lo sucedido y determinar la responsabilidad de Meza. La madre de la víctima enfrenta cargos graves que podrían traducirse en penas severas debido a la negligencia mostrada y el riesgo en el que puso a su hija.

El dolor y el duelo que ahora afronta Patricia Meza pueden estar acompañados por el peso de la justicia, que busca prevenir que situaciones tan trágicas vuelvan a ocurrir.

La comunidad se mantiene al tanto del desarrollo de este caso, esperando que las medidas preventivas y punitivas necesarias se implementen para proteger a los más vulnerables: los niños. La tragedia de Salomé Castillo sirve como un recordatorio amargo de las devastadoras consecuencias que puede tener el descuido combinado con el uso irresponsable de sustancias alcohólicas.

El impacto de esta tragedia en Maracaibo debe convertirse en un llamado de atención para reforzar las políticas de protección infantil y educación parental, evitando que más vidas inocentes se vean truncadas por episodios de negligencia. La esperanza es que de esta pérdida irreparable emerja un compromiso renovado por parte de la sociedad y las autoridades para velar por el bienestar de todos los infantes en la región.

 

Con información de El Clarín.

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