La celebración de Halloween se tornó trágica en el centro de Orlando, Florida, en la madrugada de este viernes 1 de noviembre, cuando un tiroteo masivo dejó un saldo lamentable de al menos dos personas fallecidas y seis heridas. Este triste evento, que se produjo en medio de una concurrida fiesta, ha sido reportado por medios como el New York Post.
Los disparos se desataron en el exterior de un complejo de entretenimiento conocido como The Block, que alberga una variedad de siete clubes nocturnos. En ese momento, cientos de asistentes se encontraban disfrutando de la festividad, muchos de ellos disfrazados y ansiosos por participar en un concurso de disfraces con atractivos premios en efectivo. Era un ambiente festivo que se tornó sombrío en un instante.
El jefe de policía de Orlando, Eric Smith, informó en una conferencia de prensa que las autoridades recibieron alertas sobre los disparos alrededor de la 1:07 A.M., en la intersección de Central Boulevard y Orange Avenue. Pocos minutos después, se registró un segundo tiroteo en Washington Street y Orange Avenue, ubicado a una cuadra al norte, generando aún más caos entre los presentes.
Las fuerzas policiales lograron apresar al presunto autor de los disparos, un adolescente de 17 años identificado como Jaylen Dwayne Edgar. Aunque se desconoce el motivo detrás de sus acciones, se supo que Edgar ya había tenido problemas con la ley el año anterior por robo. Durante la comparecencia de prensa, se mostraron impactantes vídeos que documentaron el momento exacto del ataque en el que el joven, caminando con un grupo, desenfunda su arma y comienza a disparar sin piedad a una víctima desprevenida. En el segundo episodio, se observa cómo vuelve a disparar cerca de una patrulla policial.
El jefe Smith estimó que entre 50.000 y 100.000 personas estaban disfrutando de las festividades en el centro de la ciudad, lo que hace que este tiroteo sea aún más perturbador, dado el grandioso despliegue de vida nocturna que caracterizaba esa noche.
DCN/Agencias