El presidente de Colombia, Gustavo Petro, declaró el domingo 10 de noviembre una situación de desastre en todo el país, a raíz de intensas lluvias que han generado inundaciones y deslizamientos en 27 de los 32 departamentos. Durante una conferencia de prensa tras un comité de emergencia, el mandatario destacó que las lluvias son consecuencia de la variabilidad climática que incrementa la vulnerabilidad en los territorios.
Carlos Carrillo, director de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (Ungrd), señaló que el departamento del Chocó ha sido uno de los más afectados, con informes preliminares que indican que más de 30.000 familias han resultado damnificadas en 25 de sus 31 municipios. Carrillo mencionó que Chocó es una de las regiones con mayor pluviosidad en el mundo y criticó la incapacidad del Estado colombiano para desarrollar las capacidades necesarias para que sus habitantes vivan con dignidad, resaltando que estas crecientes no son un fenómeno inédito en la temporada de lluvias.
El presidente Petro indicó que la declaración de desastre nacional busca atender las emergencias provocadas por la actual temporada de lluvias y otros fenómenos climáticos, como la tormenta Rafael. Se enfocarán especialmente en el norte de La Guajira, el Chocó y Bogotá.
Además, el gobierno departamental estableció una calamidad pública por seis meses y declaró una urgencia manifiesta para priorizar la atención a las comunidades afectadas. La Ungrd también anunció que asignará 2.500 millones de pesos a través de dos Fondos de Inversión Colectiva para asistir a los municipios más impactados por las inundaciones.
DCN/Agencias