La Plataforma Unitaria Democrática (PUD) exigió justicia por la muerte de Jesús Manuel Medina, uno de los detenidos tras las elecciones del 28 de julio, quien falleció este jueves bajo custodia del Estado. Según la PUD, Medina, un líder reconocido por su participación como testigo de mesa en Anzoátegui, fue arrestado el 29 de julio por las autoridades y su deceso ocurrió debido al maltrato recibido y la falta de atención médica, lo que exacerbó su diabetes y sus problemas cardíacos.
El bloque opositor señaló que la muerte de Medina es responsabilidad del régimen de Nicolás Maduro y reiteró que había alertado sobre los peligros que enfrentan los presos políticos en Venezuela. La PUD hizo un llamado a la comunidad internacional para que se pronuncie contra la violación sistemática de derechos humanos en el país.
De acuerdo con la información proporcionada por la PUD, Medina defendió la voluntad del pueblo durante los comicios y conservó actas que respaldan el triunfo del candidato Edmundo González Urrutia, a quien consideran el «presidente electo», a pesar de que el Consejo Nacional Electoral proclamó victorioso a Maduro.
María Corina Machado, líder opositora, detalló que Medina fue llevado a calabozos en condiciones inhumanas, donde sufrió maltrato y problemas de salud que resultaron en necrosis en sus piernas. A pesar de las solicitudes para su atención médica, esta le fue negada durante varios meses, alegando la necesidad de permiso de Caracas. Finalmente, fue trasladado a un hospital, donde, tras el inicio de un procedimiento para amputarle ambas piernas, falleció.
Hasta la fecha, el Gobierno no ha hecho declaraciones sobre la muerte de Medina ni sobre las acusaciones en su contra.
DCN/Agencias