Las mujeres: guerreras innatas que nunca se rinden

Gleymaris Beria es una joven que desafía los estereotipos de género que aún perduran en la sociedad venezolana. Originaria de Curiapo, un pintoresco pueblo donde la diversidad cultural se manifiesta con fuerza, Beria representa la fuerza y el compromiso de las mujeres en el deporte. Su carácter amable y su dedicación son el reflejo de un entorno que combina la herencia criolla, afrodescendiente e indígena.

Recientemente, Gleymaris fue designada como la abanderada de la delegación de Delta Amacuro para los Juegos Nacionales, donde competirá en lucha en Cumaná. Emocionada y agradecida, dice: “Hay mucho entusiasmo y ganas de luchar. Estamos en buenas condiciones físicas y esperamos que todo salga bien. Agradezco a todos por su apoyo y oraciones”.

El camino hacia estos juegos no ha sido sencillo. Gleymaris menciona que mantenerse en el peso adecuado es uno de los mayores retos que enfrenta, además de las luchas emocionales que provoca el nerviosismo y la incertidumbre antes de cada combate.

Ella también se ha convertido en una voz contra el machismo que todavía predomina. Gleymaris sostiene que el deporte es un espacio inclusivo y que la lucha, al ser un deporte de contacto, empodera a las mujeres. “La lucha olímpica es intensa y demuestra que somos fuertes por naturaleza. Nadie puede quitarme eso”, dice con confianza.

Así, Gleymaris Beria se establece como un ejemplo a seguir, no solo por su dedicación al deporte, sino también por su papel en la lucha por la igualdad de género en un entorno donde eso todavía es un desafío.

DCN/Agencias