El directorio ejecutivo del Banco Mundial dio luz verde el lunes 25 de noviembre a un proyecto destinado a fortalecer el sistema de protección social en Costa Rica. Esta iniciativa permite movilizar liquidez de manera rápida para cubrir gastos prioritarios en situaciones de emergencia social, climática o económica.
El proyecto, denominado “Préstamo de Política de Desarrollo para la Gestión del Riesgo Social con Opción de Desembolso Diferido”, se estructura en dos pilares. El primero busca mejorar la focalización de programas sociales a través del fortalecimiento del Sistema Nacional de Información y Registro Único de Beneficiarios (Sinirube), aumentando su cobertura y efectividad. Según el comunicado del Banco Mundial, esto contribuirá a una mayor inclusión de los beneficiarios.
El segundo pilar se enfoca en hacer más eficiente el gasto social, minimizando su fragmentación y promoviendo mejores mecanismos de entrega de transferencias. Nogui Acosta Jaén, ministro de Hacienda de Costa Rica, destacó la importancia de este crédito para gestionar impactos sociales en situaciones de emergencia, permitiendo una respuesta ágil ante adversidades que afecten la economía y el bienestar de la población.
Se espera que para 2026, el 85% del gasto social se direccionará utilizando el SINIRUBE para determinar la elegibilidad, un aumento considerable en comparación con el 73% en 2023. Además, se planea que el 70% de la información de los hogares se actualice en los próximos 18 meses, un incremento respecto al 53% de 2024. Por último, se busca que el 45% de las familias más vulnerables cuenten con datos georreferenciados y su situación de riesgo identificada, lo que mejorará la capacidad de respuesta ante emergencias.
DCN/Agencias