¡Hola, mi gente! Como siempre, aquí les traigo los últimos chismes del mundo del espectáculo, y hoy les traigo un tema que ha sacudido a todos: la muerte de Liam Payne, el exintegrante de One Direction, quien falleció en circunstancias muy extrañas en Buenos Aires hace unas semanas. Recientemente, se han revelado detalles sobre su última noche, y el asunto es de no creer.
Según el portal especializado TMZ, Liam estuvo pidiendo tragos a mansalva la noche del 15 de octubre, justo un día antes de su partida. Al parecer, pidió cuatro botellas de whisky y, apenas ocho horas después, se mandó pedir otras cinco. Pero eso no es todo, ya que la autopsia reveló que también consumió drogas.
El informe indica que, a un empresario argentino le solicitó seis gramos de cocaína, y este cumplió con la petición al instante. Además, Liam se habría dado la vida llamando a dos prostitutas y pidiendo más sustancias. ¡Un descontrol total! El mismo empresario se encargó de llevarle las chicas, incluso pagando el servicio porque el cantante se negó a hacerlo.
El último día de Liam estuvo lleno de excesos; además de la cocaína, pidió siete gramos adicionales a un empleado del hotel y otras cuatro botellas de whisky. La autopsia encontró una mezcla peligrosa en su sistema: crack, cocaína, metanfetamina, ketamina, MDMA y benzodiazepinas. Todo esto, al parecer, lo llevó a una inconsciencia total, culminando con su trágica caída desde la ventana de su habitación.
Así que, amigos, la muerte de Liam no solo choca por la pérdida, sino que se transforma en un relato de excesos y caos. ¡Nos mantenemos al tanto!
DCN/Agencias