Un reciente informe de Amnistía Internacional (AI) acusa a Israel de genocidio en la Franja de Gaza, basándose en el conflicto con Hamás que inicia hace 14 meses. AI sostiene que Israel ha llevado a cabo ataques intencionados que han causado la muerte de palestinos, así como la demolición de infraestructura esencial, y ha bloqueado la entrega de alimentos, medicinas y otras ayudas.
El documento, publicado el 5 de diciembre, sostiene que hay pruebas concluyentes de genocidio contra los palestinos y destaca que las acciones israelíes, descritas como “actos prohibidos por la Convención sobre el Genocidio”, buscan la destrucción sistemática de esta población. El informe analiza el periodo del 7 de octubre de 2023 hasta principios de julio de 2024, reuniendo información a través de entrevistas con alrededor de 200 residentes de Gaza y autoridades locales, además de revisar imágenes fotográficas y de satélite.
Según AI, más de 42,000 palestinos, incluidos aproximadamente 13,300 niños, han muerto a causa de ataques israelíes, así como más de 97,000 heridos. La organización describe la devastación en Gaza como la peor de este siglo, con ciudades enteras arrasadas y gran parte del territorio volviéndose inhabitable.
Israel rechazó categóricamente el informe, calificándolo de «totalmente falso» y criticando a Amnistía Internacional como una «organización deplorable». La sección israelí de AI cuestionó las acusaciones de genocidio, a la vez que solicitó investigaciones sobre presuntos crímenes en Gaza. El Gobierno israelí ha llevado la disputa a la Corte Internacional de Justicia y niega las acusaciones de crímenes de guerra contra sus líderes. Según el Ministerio de Salud de Gaza, las muertes desde el inicio del conflicto superan las 44,580, la mayoría civiles.
DCN/Agencias