¡Hola, mi gente! Hoy les traigo un resumen sobre el fenómeno que ha sacudido al mundo entero: ¡la gira «The Eras Tour» de la inigualable Taylor Swift! Esta maravilla musical ha dejado huella no solo en el corazón de sus fans, sino también en la economía global.
Para que se hagan una idea, se estima que los fanáticos, conocidos como Swifties, han gastado alrededor de ¡5.000 millones de dólares solo en Estados Unidos! Sí, así como lo oyen. Algunos dicen que este gasto es comparable al que generan los fans del Super Bowl en un solo partido. Pero no olvidemos que la gira de nuestra Tay tuvo 152 conciertos en 51 ciudades y se extendió a lo largo de cinco meses, ¡una locura!
La gira «The Eras Tour» no solo ha hecho de Taylor una multimillonaria, sino que, según analistas, ha reavivado la economía en muchos lugares post-pandemia. Las ciudades donde se han realizado los conciertos mostraron un aumento notable en el turismo, con visitantes que alargaron sus estadías para disfrutar más. La magia de Taylor ha revitalizado las zonas urbanas que aún sentían el peso de la pandemia.
Tomemos a Pittsburgh como ejemplo: albergó dos conciertos y disfrutó de una ocupación hotelera récord desde la pandemia. Se estima que la ciudad recaudó 46 millones de dólares en gastos de asistentes, la mayoría de ellos no residentes. Además, en Los Ángeles, la gira generó aproximadamente 160 millones en ingresos y creó 3.300 empleos, un respiro después de tiempos complicados.
Las plataformas de transporte también se beneficiaron. Lyft reportó un aumento en los viajes, con ciudades como Nueva Orleans teniendo un incremento del 31%. ¡Impresionante!
A lo largo de la gira, Taylor ha deslumbrado a sus 10 millones de fans, con 46 canciones en un setlist acompañado de 15 bailarines. La diva ha utilizado 60 outfits diferentes y ha entregado más de un millón de pulseras luminosas. Además, ha contado con invitados de lujo como Ed Sheeran y Hayley Williams, haciendo cada concierto un evento inolvidable.
Así que ya saben, el impacto de Taylor Swift trasciende la música, ¡es una verdadera revolución económica y cultural que ha dejado su marca en todas partes! ¡Hasta la próxima, faranduleros!
DCN/Agencias