El Gobierno de Israel respondió este jueves al informe de la organización Human Rights Watch (HRW), que lo acusa de «genocidio» y «exterminio» debido a la falta de acceso de la población de Gaza al agua. El portavoz del Ministerio de Exteriores israelí, Oren Marmorstein, catalogó el informe como un «libelo de sangre» y señaló que HRW promueve propaganda antiisraelí.
Marmorstein argumentó en su cuenta de X que Israel ha mantenido un flujo constante de agua y ayuda humanitaria hacia Gaza a pesar de los ataques de Hamás, la organización que controla la Franja. Aseguró que cuatro tuberías de agua y otras instalaciones de suministro y desalinización siguen operando, y que se han entregado camiones con agua a través de cruces israelíes, incluyendo la semana pasada.
Además, el portavoz mencionó que Israel ha permitido el ingreso de más de 1,2 millones de toneladas de suministros humanitarios a Gaza y acusó a Hamás de atacar y saquear esta asistencia. Insistió en que el informe de HRW estaba plagado de mentiras, incluso comparándolo con otros informes de la misma organización.
El informe de HRW, de 179 páginas, titulado “Exterminio y actos de genocidio: Israel priva deliberadamente de agua a los palestinos de Gaza”, sostiene que las autoridades israelíes impiden intencionadamente que los palestinos accedan al agua potable necesaria para su supervivencia.
Con información de Europa Press.
DCN/Agencias