El Gobierno de Chile ha finalizado la misión de su embajador en Venezuela, Jaime Gazmuri, y a partir de ahora, el encargado de negocios será la única representación chilena en Caracas, hasta nuevo aviso.
El comunicado de la Cancillería chilena indica que esta decisión responde a la situación tras las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024, donde Nicolás Maduro ha asegurado que continuará siendo el presidente del país a partir del 10 de enero, afirmando que este resultado es producto de un fraude electoral.
El gobierno de Gabriel Boric ha señalado que en los últimos meses ha aumentado “la falta de apertura” por parte del chavismo, lo que ha obstaculizado un diálogo bilateral efectivo. Chile espera que Venezuela pueda retomar el camino hacia la democracia y la promoción de los Derechos Humanos, valores que considera actualmente ausentes.
Cabe recordar que el Ejecutivo venezolano había ordenado en julio de 2022 la expulsión del embajador chileno en Caracas. Ahora, la decisión chilena marca el final de la misión diplomática de Gazmuri.
Las relaciones entre ambos países han tenido numerosos altibajos desde el gobierno de Sebastián Piñera hasta la actual administración de Boric, en gran medida debido a la postura chilena frente a la administración de Maduro. La designación de Gazmuri en 2023 se dio como un intento de normalizar las relaciones, pero los comentarios críticos de Boric sobre las elecciones en Venezuela complicaron los vínculos, llevando al corte formal de relaciones diplomáticas.
DCN/Agencias