Dejando atrás una vida de lujo: se separa de su millonario esposo tras enamorarse de un impostor que se hizo pasar por Brad Pitt
Una mujer de nacionalidad francesa, identificada como Anne y de 53 años, ha sido víctima de un fraude que le costó más de 850 mil dólares. El estafador se hacía pasar por el famoso actor estadounidense Brad Pitt, utilizando imágenes y videos generados por inteligencia artificial para engañarla. La historia comenzó cuando Anne recibió un mensaje en redes sociales de una cuenta que se hacía pasar por la madre de Pitt, tras compartir fotos de su viaje de esquí en Tignes.
Un día después, recibió un mensaje de quien decía ser el actor, afirmando que su madre había hablado mucho de ella. Aunque inicialmente dudó, la mujer continuó la comunicación y, con el tiempo, se entabló una amistad. En ese momento, Anne estaba casada con un hombre millonario, 19 años mayor que ella, pero había problemas en su relación.
El impostor, que evitaba tener llamadas telefónicas directas, le enviaba versos románticos y promesas de regalos costosos de lujo. Lo que comenzó como un intercambio amistoso se volvió una solicitud de ayuda financiera para un tratamiento urgente de cáncer, alegando que estaba imposibilitado de acceder a sus fondos debido a un divorcio en curso con Angelina Jolie. Anne, atraída por la historia, terminó enviando más de 9,000 dólares para cubrir tasas de aduana de regalos que nunca llegaron.
Luego de divorciarse de su esposo, por un monto de 794,000 dólares, Anne compartió este detalle con el impostor, quien de inmediato volvió a pedirle ayuda económica. Fue solo meses después, al ver a Pitt con su nueva pareja, que la víctima comenzó a darse cuenta de que había sido estafada. Actualmente, se encuentra internada en una clínica especializada en tratamientos para la depresión.
Este tipo de fraude no es nuevo, ya que el nombre de Brad Pitt ha sido usado en estafas similares. En septiembre, cinco personas fueron detenidas en España por extorsionar a varias mujeres haciéndose pasar por el actor y exigían sumas que alcanzaban hasta 325 mil euros.
DCN/Agencias