Asilados en la embajada argentina señalan que su estancia se ha transformado en una prisión

Magallí Meda, una de las cinco personas del partido Vente Venezuela que están asiladas en la Embajada de Argentina en Caracas, denunció este lunes 20 de enero que llevan diez meses en la residencia, actualmente custodiada por cuerpos de seguridad del Estado, y que su situación se asemeja a la de una prisión.

A través de sus redes sociales, Meda informó que durante el fin de semana no se permitió el ingreso de alimentos y que llevan prácticamente dos meses sin electricidad, luego de que los fusibles que alimentan la embajada fueron sustraídos.

Adicionalmente, Meda señaló que aún no observan un respeto claro hacia los derechos internacionales que les asisten. La denuncia estuvo acompañada de un mensaje de María Corina Machado, coordinadora de Vente Venezuela, quien planteó «siete principios para la libertad». En este mensaje, enfatiza la responsabilidad de los ciudadanos en hacer cumplir los resultados de las elecciones del 28 de julio, donde, según el Comando con Venezuela, Edmundo González Urrutia resultó electo. También se invoca la unidad y la coherencia para alcanzar los objetivos políticos planteados.

A finales de diciembre, Eugenia Olavarría Meda, hija de Magallí, había expresado preocupaciones sobre la escasez de agua y alimentos en la embajada, indicando que el acceso a energía eléctrica se limita a pocas horas diarias por una planta generadora, ya que los agentes impidieron que una cisterna llenara el tanque de agua.

Finalmente, Meda comunicó que puede hablar con los asilados en la embajada solo a través de aplicaciones específicas y en horarios determinados.

DCN/Agencias