Un trágico accidente aéreo ha conmovido al mundo del patinaje artístico. Este miércoles, un avión de pasajeros estadounidense colisionó con un helicóptero militar en Washington, llevando a bordo a importantes figuras del patinaje ruso, entre ellas la célebre pareja de campeones mundiales, Evgenia Shishkova y Vadim Naumov, quienes se alzaron con el oro en los mundiales de 1994.
Aunque las autoridades estadounidenses aún no han confirmado la identidad de las víctimas, las agencias rusas TASS y RIA reportaron que Shishkova y Naumov estaban en el vuelo, junto a Inna Volyanskaya, expatinadora de pareja que también representó a la Unión Soviética. Shishkova, de 52 años, y Naumov, de 55, fueron una pareja icónica en el patinaje, participando en seis campeonatos mundiales entre 1991 y 1996, conquistando medallas de oro, plata y bronce.
El hito más significativo de su trayectoria fue el campeonato mundial de 1994 celebrado en Chiba, Japón. Después de casarse en 1995, la pareja se retiró tras no lograr clasificar para los Juegos Olímpicos de Nagano 1998. Posteriormente, se mudaron a Estados Unidos para seguir su carrera como entrenadores, primero en Connecticut y desde 2017 en Boston. Su hijo, Maxim Naumov, un prometedor patinador de 23 años, había tenido un cuarto lugar en el último campeonato nacional de Estados Unidos en Kansas.
El Kremlin ha confirmado la presencia de ciudadanos rusos en el vuelo y expresó su tristeza ante la posibilidad de que Shishkova y Naumov se encuentren entre las víctimas. Por su parte, la Federación de Patinaje Artístico de Rusia manifestó su profunda consternación, recordando la notable contribución de esta pareja al deporte nacional.
Además, la comunidad de patinaje artístico de Estados Unidos también lamenta la tragedia, ya que algunos de sus miembros estaban entre los pasajeros, quienes participaban en un campamento de entrenamiento post-campeonatos en Wichita, Kansas. «El patinaje artístico es más que un deporte, es una familia unida», afirmó la Unión Internacional de Patinaje Artístico (ISU).
El accidente ocurrió cuando el avión, con 60 pasajeros y cuatro tripulantes, se aproximaba al Aeropuerto Nacional Reagan y colisionó con el helicóptero, cayendo al frío río Potomac. Esta tragedia deja una huella indeleble en el mundo del patinaje y en el corazón de quienes los admiraban.
DCN/Agencias