Los ministros de Relaciones Exteriores, Trabajo y Minas de Colombia presentaron su renuncia al presidente Gustavo Petro el domingo 9 de febrero. Esta dimisión se produjo tras un pedido del mandatario para que todo su gabinete renunciara, en medio de una crisis gubernamental que se intensificó recientemente.
Andrés Camacho, el ministro de Minas y Energía, fue el último en abandonar su cargo, anunciando a través de la red social X su compromiso de seguir trabajando por la transición energética del país. Por su parte, Laura Sarabia, quien solo ocupó el cargo de ministra de Relaciones Exteriores durante doce días, también renunció, considerando que su salida permitiría al presidente tomar las decisiones que estime necesarias.
Sarabia asumió el cargo tras la salida de Luis Gilberto Murillo, quien dejó su puesto en medio de una crisis diplomática con Estados Unidos relacionada con deportaciones. En su renuncia, Sarabia expresó su agradecimiento por el honor de servir a los colombianos.
El presidente Petro había solicitado la renuncia de su gabinete buscando cambios que permitan un mejor cumplimiento de su programa. Esta petición se realizó durante el primer Consejo de Ministros transmitido en vivo, donde se evidenciaron las contradicciones en el gabinete, particularmente en la controversia sobre la designación de Armando Benedetti como jefe de gabinete.
Otros funcionarios que también presentaron su renuncia incluyen a Gloria Inés Ramírez, ministra de Trabajo, así como a Susana Muhamad y Juan David Correa, ministros de Medio Ambiente y Cultura, respectivamente. Jorge Rojas, director del Departamento Administrativo de la Presidencia, también fue uno de los renunciantes, habiendo estado en el cargo solo seis días.
La crisis gubernamental se acentuó después de que se mostraran las diferencias en el Consejo de Ministros, y Benedetti, quien había sido embajador en Venezuela, fue obligado a dejar su puesto por un escándalo relacionado con escuchas ilegales.
DCN/Agencias