Tom Homan, exdirector interino del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), respondió a las críticas del papa Francisco sobre las políticas migratorias de Estados Unidos. En declaraciones desde la Casa Blanca el 12 de febrero, Homan sugirió que el líder religioso debería concentrarse en los asuntos de la Iglesia Católica y dejar a su administración el manejo de la frontera.
Homan afirmó: «Cíñase a la Iglesia Católica; déjenos a nosotros el control de las fronteras», refiriéndose a las preocupaciones expresadas por el Papa sobre las deportaciones durante la gestión de Donald Trump.
El Papa Francisco, en una carta dirigida a obispos estadounidenses, criticó las deportaciones masivas implementadas por Trump desde su reasunción al cargo el 20 de enero. El Santo Padre instó a los fieles a no ceder a narrativas que discriminan a los migrantes y refugiados, expresando su preocupación por el sufrimiento que estas políticas pueden causar.
Homan también cuestionó la postura del Papa al alegar que el Pontífice tiene un muro alrededor del Vaticano, sugiriendo una contradicción en su mensaje sobre la migración y la seguridad fronteriza.
Las declaraciones de ambos líderes ponen de manifiesto el acalorado debate sobre la política migratoria en Estados Unidos y la crítica a las narrativas que afectan a las comunidades migrantes.
DCN/Agencias