El número uno del mundo logró su pase a la final de Wimbledon tras derrotar a Juan Martín del Potro en un partido que solo puede ser definido de una forma: ÉPICO. El serbio y el argentino batallaron por más de 4 horas y media sobre el engramado inglés, el partido de semifinales más largo en la historia del torneo, y dejaron un marcador de 7-5, 4-6, 7-6, 6-7 y 6-3 a favor de Djokovic.
A pesar de la victoria, Djokovic no la tuvo nada fácil. Sin menospreciar al primer finalista de Wimbledon, la actuación de Del Potro, número ocho del mundo, fue cuanto menos maravillosa, llegando a parecer inclusive más capaz de alcanzar la final que el serbio.
El encuentro, además de emocionante, fue más que un deleite para la vista: las demostraciones de habilidad, las magnificas jugadas y la velocidad con la que se desarrollaba mantuvo al público enganchado y metido de lleno en el partido.
Al final, al lograr Djokovic el punto del partido no faltaron los aplausos para ambos tenistas: el victorioso y principal referente del torneo, y el derrotado, que batalló hasta el final y se fue con el cariño de un público completamente agradecido por semejante performance.
Con el triunfo, el serbio se clasificó a su segunda final de Wimbledon, su onceava final en un torneo de Grand Slam, y se enfrentará al ganador de la otra semifinal que será disputada por el ídolo local Andy Murray, quien llegó a ser finalista en 2012, y el polaco Jerzy Janowicz. El último encuentro será jugado este domingo.
Texto: Luis Santander/@santander205
Foto: EFE