Las burlas, los golpes y las humillaciones una vez más han recibido un parado en la historia del fútbol venezolano. Una juventud que sueña salió al engramado de la capital paraguaya para defender una ilusión mundialista.
Tras cantar el ¡Gloria al bravo pueblo! Los dirigidos por César Farías pisaron la pelota y la pusieron a rodar; los guaraníes corrían como locos tras cada jugador vinotinto. Los pateaban, tumbaban y empujaban, sin embargo los muchachos se levantaban con el mismo empeño.
Una lluvia de centros al área que defendía el portero paraguayo Justo Villar se dejaban caer como bombas que bombardearon constantemente la zona y que necesitaron más que milagros para salvar la portería de los goles.
Mientras tanto del otro lado de la cancha una muralla y no precisamente china se erigía sobre la grama. Era el portero venezolano Daniel Hernández, quien se mostró reacio a permitir la entrada de los disparos enemigos.
Faltando tan solo un minuto para finalizar la primera mitad del partido, el delantero criollo Salomón Rondón, perforó la portería de Justo Villlar tras una majestuosa asistencia de César el “Maestrico” González, para poner el 1-0 al minuto 44´.
Tras gritar el gol, besar el escudo de la camiseta y silenciar a las miles de almas que se dieron cita en el encuentro, los criollos se fueron al descanso con la ventaja.
La humillación paraguaya
La necesidad del equipo rojiblanco de sumar puntos en casa los llevó al borde de la locura. Sus piezas importantes como Nelson Haedo Valdez, comenzaron a reprochar las decisiones arbitrales.
Por su parte la vinotinto, un poco más confiada y ordenada en la cancha mostró decisión de seguir defendiendo los tres puntos que hasta ahora se estaban llevando a casa.
Las faltas dejaban en evidencia como flaqueaban las piernas de los dirigidos por Gerardo Pelusso, quienes buscaban fervientemente el empate.
Una penalización cerca del área de los locales los puso a temblar cuando el capitán vinotinto Juan Arango, disparó directo a puerta consiguiendo un mal despeje del portero Villar, ocasión que dejó la cena servida para que la nueva ficha del Rubín Kazán, consiguiera su doblete al minuto 67´.
Ya con la pizarra marcando 2-0 a favor de los vinotintos, no les quedó más a los paraguayos que bailar joropo del bueno. Y sentir en carne propia la humillación de caer derrotados ante aquel rival que los puso a parir en la semifinal de la pasada Copa América y del cual se burlaron.
Alineaciones:
Venezuela: Dani Hernández; A.González, Vizcarrondo, Túñez, Rosales; Seijas, Lucena; Maestrico, Arango; Josef Martínez, Salomón Rondón
Paraguay: Villar; Verón, Da Silva, Alcaraz, Bonet; Cáceres, Riveros, Samudio; Fabbro; Cardozo, Haedo Valdez.
Estadio:Defensores del Chaco en la Asunción, Paraguay
Árbitro principal:Enrique Osses (Chile)