Unas 29 comunidades rurales quedaron incomunicadas debido a inundaciones y desbordamientos de ríos tras el paso de la tormenta Chantal por República Dominicana, la cual provocó la muerte de una persona y obligó a evacuar a más de 8.100, informaron el jueves dirigentes de los grupos de socorro.
«No queremos comida, lo que queremos es que para el futuro nos arreglen los callejones para que no se meta el río», dijo Geovanny Batista, dirigente vecinal del populoso barrio La Ciénaga, donde decenas de casas quedaron anegadas por el río Ozama, que bordea la capital. Batista, madre de cuatro hijos trataba el jueves de sacar el agua de su vivienda.
Decenas de personas que habitan en las improvisadas casas de madera en las riberas de los ríos Ozama y La Isabela, en Santo Domingo, secaban el jueves sus colchones y muebles mientras la aguas de las afluentes comenzaban a bajar de nivel.
Juan Manuel Méndez, director del Centro de Operaciones de Emergencias (COE), detalló en conferencia de prensa que debido a los fuertes aguaceros del martes y miércoles poco más de 1.100 viviendas se habían inundado en diferentes partes del país.
El desbordamiento de ocho ríos cercanos al litoral sur y en el centro de República Dominicana mantenían incomunicados a 29 barrios rurales, entre ellos siete ubicado a unos 15 kilómetros al oeste de Santo Domingo.
Méndez dijo que la única víctima mortal de la tormenta es un bombero de 26 años que falleció cuando trataba de destapar una alcantarilla en el pueblo de Maimón, 85 kilómetros al norte de la capital.
Chantal se degradó a onda tropical la tarde del miércoles y continuó su paso por el Caribe tras dejar la isla La Hispaniola, que comparten Haití y República Dominicana.
Decenas de personas que habitan en las improvisadas casas de madera en las riberas de los ríos Ozama y La Isabela, en Santo Domingo, secaban el jueves sus colchones y muebles mientras la aguas de las afluentes comenzaban a bajar de nivel.
DC/Panorama