"Que todos los pueblos de la región vivan en paz, hermandad y libertad religiosa", afirmó el santo padre en la basílica de San Pablo en Harissa, al norte de Beirut, donde llegó en una visita de tres días. La primera al Líbano en sus siete años de pontificado.
El documento firmado recoge las propuestas aprobadas por los obispos en el sínodo de 2010, donde rechazaron que se recurra a la Biblia para justificar las "injusticias" y abogaron para que los palestinos tengan un Estado propio, en la línea "dos pueblos, dos estados" (Israel y Palestina), entre otros.
EFE