Presionado por la falta de recursos para financiar su populismo, el régimen de Nicolás Maduro se dispone a incrementar la represión, en una jugada que busca cimentar su permanencia en el poder a través del miedo y la intimidación, pero que catapultaría a Venezuela hacia el aislamiento internacional, dijo el diputado William Dávila.
Los planes del régimen son ejecutados en momentos en que la oposición venezolana realiza una gira internacional para tratar de convencer a los otros países que el chavismo cometió fraude electoral, mostrando pruebas a las autoridades y congresistas de otros países de las más de 6,000 irregularidades detectadas durante los comicios presidenciales de abril.
Dávila, uno de los opositores golpeados durante la “encerrona” perpetrada en abril por el chavismo en la Asamblea Nacional, adelantó que próximamente el Senado de Estados Unidos aprobará una resolución exigiendo que el gobierno venezolano cumpla con el compromiso que adquirió ante la Unasur de realizar una auditoría completa de los resultados electorales.
“Es muy importante que la comunidad internacional esté muy pendiente de los siguiente pasos en Venezuela, yo avizoro represión y persecución”, dijo Dávila el fin de semana en Miami, después de haberse reunido en Washington con legisladores -incluyendo al senador John McCain y los congresistas Ileana Ros-Lehtinen y Mario Díaz-Balart- y con representantes del gobierno estadounidense.
“Este es el panorama: hostigamiento a los medios, agresión a los diputados, militarización de la sociedad y aislamiento internacional […] Ello forma parte del modelo que Fidel Castro sugirió al ex presidente Hugo Chávez, para desmontar la democracia. Ese es el ABC, y ahora nos lo están aplicando”.
Funcionarios del gobierno venezolano no estuvieron disponibles para conversar con El Nuevo Herald.
Entre los principales blancos de represión están los líderes de la oposición y los representantes de la prensa independiente, quienes o serán enjuiciados en cortes chavistas o serán amedrentados y agredidos por los grupos violentos vinculados a la “revolución bolivariana”, dijo.
De particular preocupación es la recién anunciada creación de las Redes Estratégicas de Defensa Integral, que divide al país en distintas regiones y coloca a militares no electos en cargos de supervisión por encima de los gobernadores.
“Eso es fascismo puro”, dijo Dávila. “Ahora las regiones van a estar gobernadas por un general y los gobernadores prácticamente van a tener que rendirle cuentas a esos militares. Eso es modelo cubano”.
El modelo constituye una reformulación arbitraria del Estado que legalmente solo podría ser aplicada a través de una reforma constitucional.
En el caso de Venezuela, la reconstitución del Estado está siendo ejecutada de un plumazo, denunció el diputado.
“Se está militarizando a la sociedad. Nosotros elegimos a un gobernador por votos. Nosotros no hemos elegido a un militar con votos”, expresó.
El camino de la represión es lo único que le queda al régimen para mantenerse en el poder, en vista del creciente descontento popular provocado por la grave crisis económica del país, explicó.
DC/Elnuevoherald