Este jueves los padres y representantes de los alumnos de la Unidad Educativa 24 de Junio de Barinas, asistieron a una asamblea con directivos y docentes, donde manifestaron su posición y reconocieron como «justa» la huelga activa para exigir la firma del contrato colectivo, brindándoles apoyo para que el objetivo se concrete.
El respaldo que tuvieron los docentes implica la continuidad de la suspensión de las actividades académicas, porque indistintamente de que las autoridades de educación en Barinas expongan día tras día que la acción es ilegal, los padres y representantes conocieron que la Constitución y las leyes amparan esta medida.
Para docentes y padres presentes en esta asamblea, la educación en Venezuela se ha hecho insostenible para todos, sobre todo, cuando el financiamiento que establece la ley, referido a la dotación, seguridad, mantenimiento de infraestructura, garantías de ambientes dignos para el estudio, engrosan la lista de incumplimiento de las autoridades.
Conscientes de lo que representa continuar en huelga, sin clases, creen también que la cultura del gobernante es que si no existe presión no hay respuestas, y para este sector es indispensable que haya reivindicaciones sociales y económicas de inmediato.
El respaldo de los padres de los alumnos de la U.E 24 de Junio, obedece a muchos factores, incluyendo, el sometimiento al desprestigio que han sido víctimas los docentes, a quienes han calificado de «locheros», «flojos» y de querer perturbar el proceso de enseñanza en una violación de los derechos de los niños y niñas de esta institución.
El director de la escuela, Wilmer Berríos, fue el primero en el derecho de palabra y explicó que de los 200 días hábiles que comprenden el año escolar, en unos 22 días se estaría declarando la pérdida del presente periodo, debido a que, desde el inicio de las actividades en el último trimestre del año 2015, ha habido suspensiones de clases.
Esta situación causó preocupación a los padres de los alumnos, no obstante, esta tesis que han manejado también las autoridades, fue desmontada por los docentes que recordaron que en ocasiones anteriores, la situación ha sido peor y todo ha finalizado como debe ser.
Manifestaron su compromiso con la educación y garantizaron que de ser necesario, sacrificarían el mes de agosto y septiembre, para completar lo que haga falta del presente año escolar, y esta posición fue aprobada por los padres de los alumnos.
Tras la intervención del director, cuatro docentes tomaron la condición de voceras y explicaron a los padres la legalidad de la protesta, el amparo de ley y la necesidad de continuar en la lucha.
Si bien es cierto que desde el 5 de noviembre se discute el nuevo contrato, recordaron que en mayo de 2015 realizaron acciones de calle porque el que se vencía no contempló aumento durante el año pasado, quedando por debajo del sueldo mínimo. En julio, el presidente Nicolás Maduro manifestó un compromiso que no cumplió. Y que el incremento que fue sumando hasta un 92%, solo sirvió para nivelarlos al monto de sueldo mínimo.
Esta institución se encuentra actualmente sin PAE, las becas para alumnos de educación especial están suspendidas y los docentes están obligados a adquirir de su propio bolsillo todos los implementos para garantizar la realización proyectos, junto a los padres.
DC|EU