La víctima llegó a la calle 103 del sector Los Estanques, y se detuvo para saludar a unos amigos. Se sentó un rato para conversar y al poco tiempo llegaron los desconocidos.
Testigos indicaron que no vieron nada sospechoso hasta que el sonido de las detonaciones explotó rompiendo con la tranquilida que reinaba hasta el momento.
Los desconocidos huyeron inmediatamente, dejando a Ortiz sin signos vitales. Franklin Navarro, supervisor de regiones del cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) indicó que el móvil que manejan es el ajuste de cuentas.