Dos nietos del exastro del fútbol brasileño Pelé lo demandaron ante la justicia brasileña en reclamo de una pensión de alimentos, que cubra el pago de un plan de salud y su educación, informó el jueves el Diario de Sao Paulo.
De 13 y 15 años, los hijos de Sandra Regina, la hija de Pelé fallecida en 2006 víctima de un cáncer de mama, piden una pensión de 13.500 reales cada uno (unos 6.000 dólares). Según el abogado de ambos, los nietos «fueron abandonados intelectual, moral y materialmente» por el abuelo, cita el matutino.
«Pelé siempre los rechazó. A pesar de querer contacto con su abuelo, los chicos no se han encontrado con él desde 2011», comentó Claudio Forssell, abogado de los menores.
Por lo pronto, la justicia fijó una pensión de 1.600 reales mensuales (unos 760 dólares) hasta que se tome una decisión final, en una audiencia que está programada para noviembre. También han pedido una indemnización, pero el monto no fue revelado.
Sandra Regina había cobrado notoriedad en 1991 cuando presentó ante la justicia un pedido de reconocimiento de paternidad por parte de Edson Arantes de Nascimento, como se llama Pelé, proceso que finalizó en 1996 con una sentencia del Supremo Tribunal de Justicia.
Pelé, que concibió a Sandra en su época de jugador con la empleada doméstica Anízia Machado, rechazó reiteradamente someterse a una prueba de ADN y se opuso al reconocimiento hasta que fue dispuesto por la justicia.
Sandra Regina escribió un libro que tituló «La hija que el Rey no quiso», en el que relató el drama vivido por el rechazo de su padre.
También presentó una acción civil, desestimada en 2001 por la justicia, para obtener una indemnización por daños morales a consecuencia -según su alegato- de la discriminación a que fue sometida por Pelé, que le negó el apoyo emocional, psicológico, y financiero que tuvieron sus otros hijos.
En 2002 Pelé admitió también tener otra hija de una relación ocasional, Flavia Cristina.
Edson Arantes do Nascimento, de 72 años, tiene otros cinco hijos reconocidos, nacidos en sus dos matrimonios.
DC/ AFP
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