Por esta razón podrían perderse alimentos que esperan desde hace 18 días para ser descargados. Hasta el momento hay 13 buques con maíz amarillo y blanco y arroz, entre otros rubros que podrían fermentarse.
El colapso se debe a la falta de maquinas, ya que al menos el 50 por ciento están dañados. Las básculas de pesaje están rotas, lo que retrasa el proceso. Los buques están fondeados cerca de cuatro semanas, pero una vez que se les asigna muelle no se acelera el proceso, sino que deben esperar dos semanas más, para desembarcar y nacionalizar la mercancía.
Rosal indicó que además de la falta de maquinarias, el sistema de administración aduanero también es lento, y demora hasta cuatro días, en los que la mercancía debe permanecer en los contenedores.
Aunado a esta crisis portuaria de los tiempos de descarga, Antonio Landaeta, presidente de Fedecámaras Carabobo, indicó que después de 7 días el importador tiene que pagarle a la naviera (dueños del buque) desde $10.000 a $20.000.
La parlamentaria indicó que el traslado de los alimentos desde el puerto hasta las ciudades representa otro problema. "La semana pasada vivimos unos días difíciles porque la carga que es transportada del fondeadero de Puerto Cabello debe pasar por la Autopista Regional del Centro y ésta se encontraba afectada. En consecuencia, de ocurrir un inconveniente con esta arteria vial se está poniendo en riesgo la comida de las personas pues ahora todo proviene de la importación y llega por el puerto".
DC/Tal Cual