Este 28 de noviembre se conmemora el día de los Santos Inocentes. Entre familiares y amistades acostumbran a jugarse bromas, que van seguidas del grito “caíste por inocente”. ¿Pero, sabe usted porque se celebra tal día?
Pues esta celebración obedece a una masacre de niños menores de dos años que tuvo lugar en Belén, luego del nacimiento del Niño Dios. Según el evangelio de San Mateo, la matanza fue ordenada por Herodes, en un intento de librarse del rey de Jerusalen, cuyo nacimiento fue dado a conocer por tres sabios de la época. Así lo afirmó Monseñor Ovidio Morales en una entrevista a Globovisión.
Se dice que la celebración del “Día de los Inocentes” llegó a América, luego del proceso de la conquista. Al parecer, las coloridas fiestas surgieron de la mezcla de las tradiciones indígenas y africanas, así como todas las influencias de la época. También, hay quienes fundamentan que con el “carácter bufonesco” se busca conservar elementos de la Navidad -antes de Año Nuevo- que representa felicidad, alegría, compartir, entre otros.
Monseñor Morales afirmó que esta tradición es una representación de los primeros mártires de la historia del cristianismo, al tiempo que indicó que estos bebes perseguidos y asesinados a sangre fría, fueron recibidos en el reino de los cielos.
En Venezuela las tradiciones están más arraigadas en pueblos y caseríos de los estados Mérida, Trujillo, Portuguesa, Lara, Guárico, Monagas, Miranda y Falcón, donde hacen fiestas, misas y hacen representaciones de lo sucedido, con vestimentas especiales.
Bromas de todo tipo
Hasta el más cauto puede caer. Con bromas tan simples como cambiar azúcar por sal, y unas más complejas como decir que ha muerto una mascota o un ser querido, son algunas de las historias que cuentan aquellos que han caído en la trampa.
Lo cierto es que hay que estar atentos, porque cualquiera puede hacerte caer por inocente.
DC / @diariocontraste
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